“Vi los huesos de mi hijo", madre de Jesse Parrilla, revela que le enviaron las fotos del cadáver de su hijo

En mayo el joven jugador de baloncesto fue encontrado muerto en un auto quemado junto a una amiga, y su madre dice que alguien le envió fotos de su cadáver por teléfono.

Video Pandilla de Nueva York mata a exjugador de baloncesto por error

Michelle Morales, una madre de Nueva York cuyo único hijo fue asesinado el 15 de mayo, dice que antes que la policía le avisara de la muerte de su hijo, ella ya había visto "hasta sus huesos", pues alguien le envió fotos de su cadáver.

Esta semana, la madre de Jesse Parrilla, quien tenía 22 años al morir, aseguró que la mañana del 16 de mayo recibió varias fotos espantosas a través de mensaje de texto y que, horas después, la policía le confirmó la triste noticia; su hijo había sido asesinado, un día antes, dentro de un automóvil al que le prendieron fuego.

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Parrilla, quien había sido jugador estudiantil de baloncesto, se había reunido con su amiga Nikki Huang, de 22 años, quien se cree tenía una disputa con una pandilla y, en un ajuste de cuentas con ella, él perdió la vida. Las autoridades después le dijero, que a su hijo lo mataron "por error".

Le enviaron fotos muy crudas de su hijo, Jesse Parrilla

Morales dijo que, la mañana del 16 de mayo, ella recibió una serie de imágenes horripilantes: “Vi los huesos de mi hijo”. También revela que esas fotos le llegaron por mensaje de texto horas después de que su hijo y su amiga Nikki fueran descubiertos en el auto Honda plateado 2020 de su hijo. Este había sido incendiado, cerca de un campo de golf del Bronx.

Fuentes oficiales indicaron que ese domingo, alrededor de la 1 am, Parrilla, fue secuestrado cuando dejaba a Huang en su apartamento en Grand Street.

Los investigadores creen que Parrilla y Huang fueron conducidos a Pelham Parkway, donde les dispararon en la cabeza, antes de prenderle fuego al auto en el que estaban.

Las últimas palabras de su hijo

Poco antes de morir, Parrilla respondió las repetidas llamadas telefónicas de su madre y dijo: "Te amo, mamá", antes de que la llamada se interrumpiera abruptamente.

La escena del crimen fue descubierta a las 4:30 am del 16 de mayo.

“Siento que me faltaron el respeto por su muerte, cómo sucedió”, dijo la madre. “Merezco respuestas… Él era todo lo que tenía. Me sacrifiqué y viví por él”.

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Morales también asegura que su hijo era un joven de bien, que estaba estudiando bienes raíces en Genessee Community College, y que jamás fue parte de una pandilla.

De hecho, al momento de revelarse el hallazgo del cadáver de los dos jóvenes, un oficial de la policía indicó que Parrilla no tenía antecdentes penales. “Parece que estaba en el sitio equivocado, en el momento equivocado”, dijo.

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