Los residentes de un pueblo de Nueva Jersey cierran sus calles para que no sean utilizadas como atajo por GPS y apps móviles

En Leonia (NJ) se hartaron de que miles de conductores usen sus vías como alternativa para entrar al puente George Washington que une a Nueva Jersey y Nueva York y decidieron restringir el acceso a los no residentes y multar con 200 dólares quienes corten camino por el área.

Video Prohíben a conductores que se dirigen al puente George Washington tomar atajo por Leonia

Residentes de una localidad de Nueva Jersey, hartos de que las aplicaciones móviles de tránsito desvíen por sus calles a miles de conductores que a diario intentan escapar de la congestión vehicular en dirección a Nueva York lograron cerrar los accesos a vehículos ajenos bajo amenaza de fuertes multas.

La localidad, Leonia, queda a menos de dos millas del acceso al puente George Washington, que une a Nueva Jersey con Nueva York y que es el más transitado del mundo, con unos cuatro millones de vehículos que lo cruzan en promedio mensualmente.

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Sus residentes comenzaron a quejarse debido a que cada vez que había un retraso para entrar al puente los aparatos de GPS y aplicaciones móviles de tránsito como Google Maps o Waze sugerían a los conductores a tomar un atajo por las calles de Leonia, colapsando el tránsito también en el lugar.

Ante las quejas, las autoridades municipales y la Policía aseguraron que hicieron extensos estudios de tránsito y decidieron restringir el acceso a ciertas calles solo para los residentes y multar con 200 dólares a las personas que cortaran camino por el área.

“Todos los residentes están contentos con esta nueva orden”, dijo a Univision un policía de Leonia, John Longo, que trabajaba controlando el tránsito el primer día que entró en vigor el cierre de calles.

Longo agregó que liberando las calles la Policía y servicios de emergencia pueden moverse con más rapidez por las calles de la localidad en caso de que se les necesite.

La vecina localidad de Fort Lee también restringe por sus calles el tránsito de conductores que quieren acceder al puente.

Fue esta localidad la que estuvo en el centro del “Bridgegate” en 2013, el escándalo que perjudicó la carrera política del entonces gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, cuando las autoridades estatales cerraron varios carriles del puente en dirección a Nueva York con el supuesto propósito de colapsar las calles de Fort Lee como parte de una vendetta política.

La congestión vehicular en el área en esa ocasión duró unos cuatro días.