Este martes, el estadio de los Yankees se vistió de fiesta para celebrar a uno de sus empleados más especiales. Se trata de Kevin Eriksen, un joven de 34 años que nació con parálisis cerebral y ha luchado varios años de su vida contra la colitis ulcerosa.
Kevin Eriksen, el empleado del estadio de los Yankees que logró un inspirador récord personal de movilidad
Kevin Eriksen, un empleado del Estadio de los Yankees de Nueva York que nació con parálisis cerebral y ha luchado varios años de su vida contra la colitis ulcerosa, cumplió un año consecutivo realizando caminatas cada vez más largas para aumentar su movilidad.

Este 28 de enero se convirtió en una fecha especial y se ganó los aplausos de sus colegas del estadio porque cumplió un año consecutivo realizando caminatas cada vez más largas para aumentar su movilidad.
Lo acompañaron sus padres, Jim y Cindy Eriksen; su hermana, Sam Eriksen, y sus amigos Joe Doyle y Derek Faske.
Actualmente, Kevin trabaja para los Yankees en el Departamento de Operaciones del Estadio con el puesto de “Coordinador de Servicios para Discapacitados y Relaciones con los Huéspedes”.
¿Quién es Kevin Eriksen?
Kevin nació con parálisis cerebral, pero cuando era niño, rara vez usaba una silla de ruedas. Sus padres lo trataban como a cualquier otro niño, y asistía a las escuelas públicas locales y participaba en clases regulares de gimnasia.
Sin embargo, en 2020, Kevin fue hospitalizado después de un episodio extremadamente severo de colitis ulcerosa, en el que bajó a 120 libras.
Estuvo durante un mes hospitalizado, completamente postrado en cama, por lo que la combinación de su masa muscular deteriorada y la falta de movimiento atrofiaron aún más sus músculos, y se volvió cada vez más dependiente de su silla de ruedas.
Después de que le recetaron corticosteroides, los músculos de Kevin se deterioraron aún más y su apetito aumentó, por lo que en poco tiempo llegó a pesar 240 libras, no podía caminar y dependía casi por completo de su silla de ruedas.
Sin embargo, hace exactamente un año, la noche del 28 de enero de 2024, Kevin tuvo un momento de luz.
A partir de esa noche, en el frío helado, se comprometió a salir a caminar todos los días. La primera caminata fue de 0.2 millas y, aproximadamente, cada mes, Kevin aumentaría la longitud de su caminata diaria en 0.2 millas.
Se comprometió no solo a caminar, sino a seguir una trayectoria constante de mejora de su capacidad para caminar y hacerlo todos los días durante más de un año.
En ese tiempo, Kevin ha recorrido más de 500 millas y ha bajado aproximadamente 70 libras.
***Este artículo fue publicado como parte de una asociación con TMX***






















