Este hispano en Long Island lucha por un trasplante de riñón, pero su estatus migratorio ha sido un obstáculo
Saúl Santos, de 28 años, se encuentra hospitalizado recibiendo tratamiento ante la dificultad de recibir el órgano. “En este país no me han querido ayudar porque soy indocumentado”, afirma. Aunque Santos cuenta con un donante compatible en su natal Honduras, no tiene los recursos ni la posibilidad de viajar.
Este hispano en Long Island lucha por un trasplante de riñón, pero su estatus migratorio ha sido un obstáculo
Saúl Santos, de 28 años, se encuentra hospitalizado recibiendo tratamiento ante la dificultad de recibir el órgano. “En este país no me han querido ayudar porque soy indocumentado”, afirma. Aunque Santos cuenta con un donante compatible en su natal Honduras, no tiene los recursos ni la posibilidad de viajar.