Patricia O'Grady, de 84 años, fue atropellada por un automóvil cerca de su casa en Greenwich Village y murió a causa de sus heridas, informó el New York Times. Tuvo una carrera profesional en las tablas de cerca de 50 años y actuó en docenas de producciones teatrales, así como en telenovelas y en la película 'Taxi Driver'.
Esta anciana actriz pagó menos de 30 dólares de renta en Nueva York durante más de sesenta años
El increible monto se debe a que la propiedad estaba bajo regulaciones de alquileres controlados, y ella se negaba a abandonarlo a pesar de que no tenía agua caliente, ducha ni calefacción.


Su apartamento, sin embargo, es lo que está causando revuelo, después de que el New York Post informara que la difunta actriz pagaba de renta mensual menos de lo que cuestan 10 lattes (grandes) en Starbucks: $ 28.43, para ser exactos.
O'Grady se mudó a Greenwich Village en 1955 junto con tres amigas actrices. Comenzaron pagando 16 dólares de renta porque ayudaban a barrer los pasillos del edificio.
El apartamento estaba completamente vacío, y entre las cuatro fueron haciendo pequeños arreglos. No había muebles, ni lavamanos, ni bañera, ni agua caliente ni calefacción, pero tenían dos chimeneas, una estufa e incluso instalaron un fregadero y mobiliario básico.
Las compañeras de habitación de O'Grady se fueron mudando a mejores lugares con el pasar del tiempo, y el apartamento permaneció igual durante 63 años hasta el fallecimiento de O'Grady el pasado marzo.
El departamento tenia una sola lámpara con un único bombillo. Cuentan los vecinos que O´Grady sufría de osteoporosis y se le dificultaba cambiarlo y por eso vivía a la luz de las velas.
Ella pasaba los días en el cercano YMCA, donde nadaba, se duchaba y leía el New York Times. Hasta poco tiempo antes de su fallecimiento, iba dos veces a la semana a hacer clases de danza en la escuela del Joffrey Ballet, cerca del apartamento barato. Su hermana Roberta refiere que el bajo monto de esa renta fue lo que le permitió a O´Grady tener una carrera como actriz.
Adam Pomerantz, quien compró el edificio de apartamentos en 2002, aumentó el alquiler solo una vez, de los $ 26.45 que estaba pagando cuando compró el edificio. Consultó a un abogado, y después de estudiar con detenimiento una hoja de cálculo de control de alquileres sólo pudo añadirle $1.98.
O'Grady se negaba siempre a que se hiciera cualquier tipo de arreglo, le contó Pomerantz al New York Post. "Lo que me estás haciendo me está torturando. Por favor, deja el apartamento como está", le dijo a Pomerantz cuando una vez intentó instalar un sistema de calefacción.
Los planes del propietario para el departamento ahora son invertirle algún dinero para arreglarlo y tratar de obtener alrededor de $ 5,000 al mes por ello.















