Consecuencias del abuso sexual infantil y ayudas para hacerle frente

De acuerdo a estadísticas del Departamento de Justicia, 1 de cada 3 niñas y 1 de cada 7 niños serán agredidos sexualmente antes de que cumplan 18 años. Y, según el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU, más del 90 por ciento de las víctimas de abuso sexual infantil conocen a su agresor. Por eso, se advierte a los padres que sean muy cuidadosos con las personas que invitan a sus casas, o a quienes dejan a cargo a sus hijos.

El abuso sexual infantil es una experiencia infantil adversa que tiene graves consecuencias a largo plazo para quienes han sido víctimas e, incluso, sus familias. Una agresión sexual no solo tiene un gran impacto sicológico en su víctima, también llega a afectar su salud y cómo se desenvuelve como adulto con los demás.

Trastornos que sufren las víctimas de abuso sexual infantil

Los niños abusados, al crecer, tienen tres veces más probabilidades de experimentar los siguientes trastornos en comparación con los adultos que no fueron abusados:

• Trastorno de personalidad fronterizo
• Depresión
• Ansiedad
• Trastorno de estrés postraumático (PTSD)
• Trastornos de la alimentación
• Uso y abuso de drogas y alcohol
• Mayor riesgo de suicidio
• Problemas de salud como fibromialgia, problemas gastrointestinales, cardiopulmonares, ginecológicos y obesidad, entre otros.

De acuerdo a Psychology Today, estos trastornos “pueden tardar años en desarrollarse, ya que se cree que el abuso altera la estructura y la química del cerebro durante su período de desarrollo”. Por ejemplo, un estudio encontró que el tiempo promedio entre el abuso y el inicio de la depresión fue de 11.5 años, mientras que otro estudio encontró un promedio de 9.2 años desde el momento del abuso hasta el inicio de la depresión y 8 años hasta el inicio del síndrome de estrés postraumático.

¿Cómo ayudar a una víctima de abuso sexual infantil?

Lo principal es comprender que cada caso y cada niño es distinto, por lo que la ayuda se tendrá que “personalizar” de acuerdo a la edad y situación de la víctima. Pero, el primer paso siempre será buscar atención médica y reportar el caso a las autoridades.

Créale al niño. Lo más importante es creerle al niño. Hay poca evidencia de que los niños hagan acusaciones falsas de abuso; lo que es más común es que un niño niegue que el abuso ocurrió cuando sucedió, así es que si un niño le dice que han abusado de él, créale. - Y, si un niño denuncia un abuso sexual que en realidad no ha ocurrido, sigue siendo un grito de ayuda muy serio y será importante buscar apoyo profesional.

Asegúrese de decirle al niño que le cree. Creer es también el primer paso para ayudar al niño a sanar.

No haga promesas que no pueda cumplir. Por ejemplo, no le prometa al niño que nunca más tendrá que volver a ver al abusador. No puede garantizar que el niño no lo hará y, por lo tanto, no debe prometerlo.

Asegúrele al niño que el abuso no es culpa suya. El mayor temor del niño es ser responsable del abuso. Además, uno de los peores trucos que los abusadores les hacen a los niños es convencer al niño de que crea que es un socio igualitario en el abuso.

Mantenga la calma. Aunque se sienta sorprendido o molesto. Su tranquilidad le asegurará al niño que no ha hecho nada malo.

No interrogue al niño. Puede ser traumático para el niño repetir su historia varias veces. A menudo, al niño le conviene esperar a que un trabajador de la división infantil realice la entrevista. Al hablar con el niño, déjelo que dirija la conversación.

Informe inmediatamente el abuso a las autoridades.

Terapia para las víctimas de abuso sexual infantil

En la mayoría de las situaciones, es posible que la víctima no necesite una terapia intensiva prolongada, sin embargo, es útil para que el niño y los padres puedan hablar de lo sucedido.

El tratamiento, que involucra a padres e hijos, que ha recibido un apoyo científico considerable es la Terapia Cognitiva Conductual Focalizada en el Trauma. Cada vez hay más pruebas de que, con el apoyo de una persona capacitada,, muchos niños y padres se recuperan eficazmente y pueden sentirse más fuertes y unidos como familia.

Si el niño que ha sido abusado ya habla y comprende lo que se le dice, es importante que los padres le hagan llegar estos mensajes:

• Te amo.
• Lo que pasó no es culpa tuya.
• Estoy aquí para escucharte.
• Juntos vamos a superar esto.
• Nosotros somos más fuertes que este problema.
• Haré todo lo que pueda para mantenerte a salvo.

Para encontrar recursos y orientación en cómo enfrentar esta situación, puede visitar este enlace.

Si su hijo está en peligro, no dude en llamar al 911. También puede llamar a la línea directa nacional de agresión sexual al (800) 656 -HOPE (4673). Y si quiere conversar con alguien de manera anónima, comuníquese al teléfono nacional de emergencia de abuso infantil al (800) 422-4453, a cualquier hora las 24 horas, los siete días de la semana (24/7).

Así mismo, si sospechas que un niño es víctima de abuso sexual, puedes reportarlo, en este enlace.

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