Nuevo fiscal asume el caso de interferencia electoral en Georgia contra Trump y otros

ATLANTA.- Un veterano fiscal anunció que asumirá el caso de interferencia electoral en Georgia contra el presidente Donald Trump y otras personas, luego de la salida de la fiscal del condado de Fulton, Fani Willis, del proceso. Pete Skandalakis, confirmó el viernes que él mismo tomará las riendas del caso.

Aunque es poco probable que haya acciones inmediatas contra Trump mientras sea presidente, otros 14 acusados, incluidos Mark Meadows y Rudy Giuliani, todavía enfrentan cargos, señala AP.

El anuncio se produjo después de que nadie más aceptara asumir el expediente dejado por Willis, quien fue apartada tras la controversia provocada por una relación romántica con el fiscal especial que había designado.

El Prosecuting Attorneys' Council of Georgia, un organismo no partidista, quedó a cargo de nombrar a un nuevo líder. “Se contactó a varios fiscales y, aunque todos fueron respetuosos y profesionales, cada uno rechazó el nombramiento”, dijo en un comunicado por correo electrónico.

Mientras tanto, acciones legales contra Trump se consideran improbables durante su mandato, pero los otros 14 acusados continúan bajo proceso, entre ellos el exalcalde de Nueva York y exabogado de Trump, Rudy Giuliani, así como el exjefe de gabinete de la Casa Blanca Mark Meadows.

Trump anunció esta semana perdones para personas acusadas de apoyar sus esfuerzos por revertir la elección de 2020, incluyendo a algunos imputados en Georgia, aunque Skandalakis ha reiterado que eso no afecta los cargos estatales.

Además de Giuliani, en la larga lista de personas que recibieron perdones “plenos, completos e incondicionales” también están Mark Meadows, jefe de gabinete de Trump en 2020, los abogados John Eastman y Kenneth Chesebro, que ayudaron a idear la estrategia de presionar al entonces vicepresidente Mike Pence para que no certificara el resultado electoral el 6 de enero de 2021, Boris Epshteyn, asesor de Trump de larga data; y Sidney Powell, abogada conservadora que lideró otra ofensiva legal en varios estados contra el resultado electoral.

El documento dice explícitamente que el perdón no aplica al presidente Donald Trump.

“Esta proclamación pone fin a una grave injusticia nacional perpetrada contra el pueblo estadounidense tras las elecciones presidenciales de 2020 y continúa el proceso de reconciliación nacional”, se lee en el documento, que tiene fecha del 7 de noviembre y aparece firmado por el presidente.

De acuerdo con AP, después de que la Corte Suprema de Georgia rechazara en septiembre escuchar la apelación de Willis, el Prosecuting Attorneys' Council quedó encargado de designar un nuevo fiscal.

Según explicó Skandalakis, él tenía varias opciones, y éstas eran dejar pasar el plazo, informar a la corte que no había ningún fiscal disponible, lo que habría provocado que el caso se desestimara, o asumirlo él mismo. Finalmente, dijo que esa última era “el curso de acción correcto”.

“El público tiene un interés legítimo en el resultado de este caso”, escribió. “Por lo tanto, es importante que alguien tome una decisión informada y transparente sobre cómo proceder”.

Cabe destacar que la oficina de Willis entregó 101 cajas de documentos el 29 de octubre y un disco duro de ocho terabytes con todo el archivo investigativo el 6 de noviembre. Aunque todavía no completa su revisión, Skandalakis señaló que tomó el caso precisamente para analizarlo a fondo y determinar los próximos pasos.

El abogado principal de Trump en Georgia, Steve Sadow, aseguró que confía en que una una “revisión justa e imparcial” llevará a la desestimación de los cargos.

“Este proceso políticamente cargado tiene que llegar a su fin”, afirmó por correo electrónico. Un portavoz de Willis declinó comentar y remitió las preguntas al Prosecuting Attorneys' Council.

¿Quién es Pete Skandalakis?

Skandalakis dirige el consejo desde enero de 2018 y antes pasó unos 25 años como fiscal de distrito electo del Coweta Judicial Circuit, al suroeste de Atlanta.

Willis presentó la amplia acusación contra Trump y otros 18 implicados en agosto de 2023, usando la ley estatal contra el crimen organizado para alegar una conspiración masiva destinada a revertir ilegalmente la estrecha derrota de Trump frente a Joe Biden en Georgia.

La defensa pidió la destitución de Willis luego de que, en enero de 2024, se revelara su relación romántica con Nathan Wade, el fiscal especial que ella misma había contratado. En su momento, alegaron un conflicto de interés y aseguraron que Willis obtuvo beneficios cuando Wade usó parte de sus ingresos para pagar vacaciones de la pareja.

En una audiencia extraordinaria al mes siguiente, Willis y Wade testificaron sobre detalles íntimos de su relación, insistiendo en que empezó después de la contratación y que siempre dividieron los gastos de viajes y salidas.

Esta nota se realizó con información de AP.