No fue ni la mejor noche, ni la mejor idea para la secundaria Christopher Columbus en Miami. El pasado viernes en un hotel cercano al aeropuerto internacional de la ciudad, presentaron a sus alumnos en el baile de graduación, un espectáculo con un tigre y otros animales salvajes que, aunque estaban enjaulados, fueron sacados por unos minutos, acompañando a unos bailarines danzaban con fuego.
Cómo un tigre enjaulado provocó indignación y luego la disculpa de una secundaria en Miami
Inspirados en el tema del baile "Bienvenidos a la jungla", los organizadores del baile de graduación de una escuela ofrecieron un peligroso espectáculo con una variedad de animales exóticos. Las reacciones negativas en las redes sociales no se hicieron esperar.


Al día siguiente las reacciones indignadas no se hicieron esperar. La hermana de un alumno, Marie-Christine Castellanos, publicó en redes sociales varios videos donde claramente puede apreciarse el riesgo al que estuvieron sometidos los asistentes a ese baile de graduación.
Castellanos señaló a CBS Miami que los tigres son animales salvajes y "no necesitan ser exhibidos como objetos para la diversión, porque no les gustan ni las jaulas, ni el fuego, ni la música, ni las cámaras". Manifestó no tener palabras para expresar su molestia e indignación.
Los ecologistas también hablaron
PETA también expresó su molestia a NBC Miami enfatizando que a los animales salvajes no se les puede considerar como parte del decorado de una fiesta de graduación.
Fueron contundentes al asegurar que estos espectáculos además de ser muy peligrosos, envían un mensaje dañino al promover la utilización de ellos para la diversion humana.
Ron Magill, vocero de ZooMiami, también manifestó su indignación al Miami Herald, opinando que según las fotos y videos del evento, el tigre parecía estar nervioso. "Realmente no sé qué estaban pensando". Afirmó que el tiempo de explotar animales para la diversión y el entretenimiento ya pasó.
Tenían permiso, pero se disculparon
Un reporte de Sun Sentinel informó que, en principio, voceros de la escuela secundaria Christopher Columbus explicaron, a modo de defensa y justificación, que el tigre, las guacamayas y el zorro africano de este show fueron suministrados por una empresa autorizada por la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (FWC, por sus siglas en inglés) y que oficiales de la policía local estuvieron presentes para garantizar la seguridad de los asistentes.
Sin embargo, enviaron un comunicado a ABC Miami en el que señalaron que, después de reflexionar, lamentaban la decision de haber presentado animales vivos en su fiesta de graduación. El director David Pugh, en ese comunicado quiso dejar claro que lo sucedido "no refleja los valores católicos de su escuela".
Una vez calmada la indignación, la escuela aseguró que había aprendido mucho de esta penosa experiencia.



