Miles de personas se reunieron en el estadio Atanasio Girardot de Medellín a la misma hora en que se disputaría la final de la Copa Sudamericana. Con velas, flores, cánticos y camisas blancas, los colombianos mostraron su solidaridad a Brasil y a las familias de los jugadores, directivos, periodistas y tripulación que murieron en el siniestro.