Un hombre no identificado cubrió su cara con la capucha el KKK mientras hacía sus compras en su supermercado de San Diego, California. El incidente fue considerado una provocación. La publicación de las imágenes desataron la controversia en redes sociales y muchos usuarios manifestaron su descontento por el uso de símbolos de intolerancia y racismo en plena pandemia del coronavirus.