El terapeuta familiar, Juan Rodríguez, asegura que esta es una temporada sensible, donde las emociones están exaltadas y muchas veces no son las más adecuadas. Recalca que se debe tener claro cuál es el propósito de esta fecha, paz y armonía, y al tener claro esto "vale la pena buscar un momento de acercamiento, de paz y de tranquilidad". Dice que no se debe esperar a que la otra persona sea quien dé el primer paso, "el orgullo nos mata a todos. A veces uno piensa que la otra persona es la equivocada y no somos capaces de ofrecer una disculpa", recalca.