Uno de los afectados fue Albert Elizondo, dueño de una vivienda que terminó destrozada con ventanas rotas y orificios en el techo. En el patio del inmueble el hombre tenía dos vehículos estacionados, los cuales fueron dañados por objetos que volaban y arrastrados por el viento unos cuatro metros. Autoridades confirmaron que algunos cables del tendido eléctrico fueron derribados y ya se trabaja para restablecer el servicio.