Las altas temperaturas que experimentan el área de Houston y gran parte de Estados Unidos no solo pueden afectar físicamente a las personas, también psicológicamente. Expertos aseguran que la exposición a olas de calor está ligada a emociones no placenteras, como la irritabilidad, apatía y agresión. Según un reporte de la Escuela de Medicina de Baylor, el calor altera estos comportamientos debido a su impacto en la serotonina.