El análisis fue realizado por Baylor College of Medicine y se trata de errores directos o indirectos al coronavirus. Uno de ellos es la falta de pruebas accesibles para detectar la enfermedad y los resultados tardíos a la hora de informar a las personas. Otro inconveniente es sobre los pacientes que no visitan centros médicos por temor al contagio, pero tienen padecimientos agudos como derrames cerebrales o ataques cardiacos.