Saron James, de 62 años de edad, perdió la vida tras ser baleada en la ciudad de Katy cuando se dirigía hacia su domicilio en un auto conducido por su esposo. El alguacil del condado Harris, Ed González, exigió justicia para la familia por el caso que investigan como un posible crimen de ira al volante y que terminó con la muerte de una persona inocente.