Sin importar el frío, cientos de personas salieron a las calles de Alaska para presenciar este fenómeno que no se veía desde hace 198 años. Con cámaras, quienes pudieron disfrutar de la luna de sangre, intentaron conservar una imagen para guardar el recuerdo de este primer eclipse de 2018.
Sin importar el frío, cientos de personas salieron a las calles de Alaska para presenciar este fenómeno que no se veía desde hace 198 años. Con cámaras, quienes pudieron disfrutar de la luna de sangre, intentaron conservar una imagen para guardar el recuerdo de este primer eclipse de 2018.