FRESNO, California.- El impacto económico dejado por la pandemia del coronavirus ha repercutido en que organizaciones sin fines de lucro no generen los mismos recursos que antaño. Una de ellas es CASA (Defensores Especiales Designados por la Corte, por sus siglas en inglés), quienes trabajan con jóvenes que han sufrido tráfico, abuso o maltrato, y se encuentran a la espera de ser adoptados.
Coronavirus: niños víctimas de tráfico o maltrato sin ayuda debido a baja en la recaudación de fondos
La organización CASA que se encarga de apoyar menores en riesgo social enfrenta un impacto económico que ha afectado directamente a niños abusados, maltratados o víctimas de violencia.

Al menos 230 menores se encuentran en lista de espera debido a la falta de recursos que la organización enfrenta este 2020 debido a la pandemia del coronavirus. Estos niños han sido abusados, tienen necesidades especiales y han sido arrancados de sus hogares como manera de protegerlos.
“Estamos mirando un crecimiento en depresión y ansiedad en nuestros niños", dice Carmina Ramos, supervisora en CASA.
La organización CASA trabaja con los tribunales para ayudar a jóvenes en proceso de adopción o en hogares de crianza. Son 2,900 menores de edad considerados "en riesgo" en los condados de Fresno y Madera. Además, 230 están en proceso de ser derivados a hogares de crianza
“Muchos de nuestros niños han sido no solamente abusados mentalmente, pero también han sido maltratados físicamente", afirma Ramos.
Los voluntarios de la organización además velan por pequeños con necesidades especiales, o víctimas de trata humana, “para que convivan con ellos, para que los saquen a pasear, para que se conviertan en ese apoyo que ellos necesitan y ellos puedan hablar y dejarles saber que es lo que ellos quieren. Los voluntarios son los ojos y oídos del juez".
Durante la pandemia, las interacciones en persona no son una opción, y aunque los voluntarios se esmeran por continuar siendo un soporte, Ramos revela que los cambios en los últimos meses perjudican la situación ya inestable de estas criaturas.
“Hay muchos niños que miran al voluntario a veces hasta como su única familia", comenta la supervisora de CASA. La organización además provee útiles escolares, regalos de navidad, y otros recursos para ellos.
“A veces los niños nada más tienen un cambio de calcetines, nada más un cambio de ropa porque no pudieron llevarse todo [cuando los trasladaron de hogar]".
No obstante, este año el coronavirus cambió los planes. CASA canceló eventos de recaudación de fondos en el 2020, lo que significó una disminución de $300 mil dólares en ingresos.
“Sí nos ha impactado demasiado", comparte Ramos, por lo que CASA ahora hace un llamado a la comunidad, buscan donaciones y voluntarios.
“Ellos pasan por traumas muy severos, y tristemente cuando un niño va a la corte, escucha que su papá o mamá o un familiar dice ‘No lo puedo tener’.”
Para inscribirse como voluntario, se requiere entre 15 a 20 horas al mes, y debido al coronavirus, puede donar su tiempo a la distancia.
“Los voluntarios hablan con los niños por videollamada, algunos les mandan hasta comida de su restaurante favorito para que sepan que se están acordando de ellos, otros juegan videojuegos con ellos", cuenta Ramos .
Para más información sobre cómo donar tiempo o dinero, visite casafresnomadera.org
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