Cárteles y pandillas podrían estar relacionados a la masacre de seis personas en Goshen
El Alguacil del Condado de Tulare, Mike Boudreaux, informó en una conferencia los nuevos detalles de la masacre en Goshen.
Según Boudreaux, la masacre en donde seis personas, incluidas una joven de 16 años y su bebé, fueron asesinadas puede estar relacionada a cárteles y pandilleros del Valle Central.
El informe del alguacil dice que no se sabe aún si un cartel es el responsable del crimen, pero en el estado operan el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa.
Al momento, no se han tenido arrestos por el crimen, sin embargo, el alguacil también informó que se encuentran cerca.
Por lo que Boudreaux pidió al gobernador de California, Gavin Newson, levantar la prohibición de la pena de muerte, en especial en crímenes contra menores.
Asimismo, se informó del aumento de $20,100 dólares de recompensa a quien dé detalles que lleven al arresto de los sospechosos de la masacre en Goshen.
Así fue la masacre en Goshen
La madrugada del lunes 16 de enero, aproximadamente a las 4:00 am, las autoridades recibieron un reporte por un tiroteo activo en la cuadra 6800 de Harvest Avenue, entre Road 68 y Kame Drive.
Según Mike Boudreaux, algunas víctimas fueron asesinadas en el exterior de la propiedad y otras en el interior.
Según el informe, en una zanja cercana a la propiedad, la joven Elyssa Parraz fue hallada con su pequeño hijo entre los brazos. Ambos sin vida.
Las investigaciones determinaron, según Boudreaux, que la joven huyó al momento del ataque y se escondió. Sin embargo, fue encontrada por los agresores y asesinada junto a su bebé de solo 10 meses.
“Esta joven corría por su vida y sé con certeza que no había razón para matarla, pero lo hicieron”, comentó Boudreaux. “No había ninguna razón para ejecutar a este bebé, pero lo hicieron”, agregó.
Por otro lado, se dijo que la adulta mayor Rosa Parraz fue asesinada mientras dormía en su cama.
En la conferencia de prensa, las autoridades también informaron que intentaron salvar a algunas de las víctimas que aún respiraban cuando llegaron a la propiedad. Sin embargo, todas fallecieron.
Según el informe del alguacil, tres personas que también se encontraban en la propiedad al momento del tiroteo, escaparon de la masacre, una de ellas logró llamar a la policía.
Dos mujeres sobrevivieron escondiéndose en un remolque y un hombre se escondió dentro de la casa y bloqueó una puerta con sus pies. “Estaba en tal estado de miedo que todo lo que podía hacer era sostener la puerta con la esperanza de no ser la próxima víctima”, contó Boudreaux.
"No puedo imaginarme qué tipo de monstruo haría algo así", declaró a The Associated Press, Samuel Pina, abuelo de Alissa Parraz.