El asesinato del niño Santos Rodríguez, de 12 años, en 1973 en manos del oficial Darrell L. Cain, de 30 años, hizo enojar a la comunidad hispana de la época en Dallas. Según reportes, el menor y su hermano, de 13 años, habían sido detenidos por supuestamente robar 8 dólares de una gasolinera, los oficiales los llevaron a una patrulla y jugaron ruleta rusa hasta que dispararon a Santos y dejaron su cuerpo esposado junto a su hermano, quien siguió con vida.