Las tasas de aumento de los contagios de coronavirus en Arizona podrían afectar nuevamente la habilidad de los hospitales de satisfacer la demanda de atención y cuidados médicos necesarios para enfrentar la crisis. Previamente, en el mes de julio, Arizona fue el primer estado del país en implementar el plan de crisis estándar, según un memorando interno de Banner Health.
Banner Health busca a más personal para enfrentar crisis de coronavirus
El sistema hospitalario reporta que actualmente tienen la capacidad adecuada para atender a pacientes con o sin covid-19. Sin embargo, se están preparando para el auge de los casos de coronavirus que se esperan en los próximos meses.
Por:Nicole Gutierrez
Video Banner Health en Arizona se prepara para un aumento de pacientes con coronavirus
Actualmente, el estado del Gran Cañón está viendo cifras de coronavirus en ascenso, al igual que las del verano. El porcentaje de casos positivos en la última semana de octubre fue el más alto desde principios de agosto con un aumento del 7.2%. También, las cifras muestran un aumento de casos en la mayoría de los condados de Arizona con excepción de los condados de Gila y La Paz quienes los han disminuido en el último mes.
“Aquí en Arizona hemos visto incrementos graduales en el recuento de casos, hospitalizaciones, camas de UCI en uso y ventiladores en uso. Los modelos predictivos indican que Arizona pronto podría experimentar un crecimiento exponencial del virus si no se realizan esfuerzos para mitigar la propagación del COVID-19”, publicó Banner Health en su sitio web.
En el comunicado Banner Health, el sistema hospitalario señalo que actualmente sus hospitales tienen la capacidad adecuada para atender a pacientes con COVID-19 y sin COVID-19 .
Sin embargo, el proveedor de salud indicó que generalmente contratan a 1,000 enfermeras adicionales durante la temporada de influenza de invierno, pero espera duplicar ese número en respuesta a un segundo aumento esperado de coronavirus.
Además, Banner dice que también han estado capacitando a 900 miembros de los hospitales de otras unidades en habilidades necesarias para cuidar a los pacientes de la unidad de cuidados intensivos en caso de que el equipo de la UCI se sienta abrumado.
