Natalie Renne Russel, de 30 años, dejó una botella de metadona líquida que su hija de dos años se bebió y en lugar de llamar a emergencias le dio metanfetaminas, provocándole la muerte.
Natalie Renne Russel, de 30 años, dejó una botella de metadona líquida que su hija de dos años se bebió y en lugar de llamar a emergencias le dio metanfetaminas, provocándole la muerte.