No, no estoy hablando de una piscina de esas que se pueden ver en el fondo de las casas, y tampoco de la piscina del club. Me refiero a una piscina natural, que tampoco es similar a la imagen de éstas que puede tenerse a primera vista (un conjunto de rocas en un lago que encierran unos miles de litros de agua).
Una piscina bastante peculiar

Este caso de piscina natural trasciende cualquier concepto de piscina en el que podamos pensar. Se trata de una piscina que se encuentra localizada justo al borde de una catarata, a 100 metros de altura.
Si es que asocias a las cataratas como fuente de peligro extremo (tal como haría cualquier persona normal), esta piscina probablemente te eche al tarro de basura los preconceptos que tienes.
Esta piscina lleva el nombre de Piscina del Diablo, por razones obvias, y se pueden encontrar en las Cataratas Victoria, que a su vez se encuentran en el río Zambeze, en la frontera entre Zambia y Zimbabwe. Entre los meses de septiembre y diciembre, el río Zambeze desciende su caudal, pudiéndose así vivir esta experiencia extrema y no apta para cardíacos, tal como se puede ver en este video.
VIA | Diario del Viajero







