Toda tu vida fuiste un genio y no lo sabías: tu trasero es la respuesta

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Que el cerebro es el rey en nuestro cuerpo es algo a lo que nos acostumbramos a escuchar. Es que prácticamente todo lo que hacemos o sucede en nuestro organismo tiene, por detrás, al cerebro moviendo sus redes neuronales.

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Ahora bien, lo que no nos han dicho es que tenemos un segundo cerebro. ¡Sí, así como lo lees! Y lo más curioso de todo es que se encuentra cerca del trasero, y es tanto o más inteligente que el cerebro que todos conocemos.

El segundo cerebro o «cerebro intestinal»

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Quien te permite leer e intentar comprender lo que estás leyendo en este momento es tu cerebro en la cabeza, pero probablemente no tenías idea de que tu «cerebro intestinal» está allí, pidiendo a gritos su merecido reconocimiento.

Claro que no es lo que se entiende normalmente por cerebro, pero su manera de funcionar independientemente de él, le permite al intestino controlar los movimientos musculares sin la ayuda del sistema nervioso central.

Tenemos neuronas en el trasero. Bueno, mejor dicho en el colon e intestino grueso, y son quienes forman el sistema nervioso entérico. Su capacidad de funcionar sin necesariamente recibir instrucciones del cerebro es lo que hace que se lleve el título de segundo cerebro.

Los investigadores aún desconocen hasta dónde llegan las capacidades de este sistema nervioso, pero los estudios científicos están sobre la mesa, y pronto conoceremos más sobre este otro sector inteligente del cuerpo. A partir de un estudio realizado con ratones de laboratorio fue que se extrajo nueva información acerca del sistema nervioso entérico. Los científicos estimularon el colon de ratones con descargas eléctricas leves, y vieron un «nuevo patrón de activación neuronal coordinada rítmica» que corresponde a los movimientos musculares en las secciones cercanas del intestino grueso.

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Dichos movimientos neuronales rítmicos y sincronizados probablemente ayuden a estimular secciones específicas de los músculos intestinales a un ritmo estándar, es decir, mantienen la materia fecal en movimiento en la dirección correcta (hacia fuera del cuerpo) y a un ritmo constante.

Otro punto interesante de la investigación es que, debido a que algunos científicos suponen que el sistema nervioso entérico evolucionó antes que el sistema nervioso central, este patrón de movimiento de las neuronas en el colon podría ser el cerebro más antiguo funcionando en nuestro cuerpo.

Esto quiere decir que el cerebro del trasero podría ser el primero y no el segundo cerebro, ya que los mamíferos evolucionaron primero para mantener la materia fecal en movimiento, y luego para encargarse procesos cerebrales más complejos.

Por el momento estos estudios solo se han realizado en ratones, por lo que deberán investigar otros mamíferos para confirmar las teorías. Los científicos deberán poner en funcionamiento sus dos cerebros, a todo vapor, para descifrar más enigmas de nuestro organismo. ¡Cabeza, trasero y manos a la obra!