Si consideras que el debate digital sobre los aluxes, que desató Josefa González (futura titular de la SEMARNAT en México), sólo podría ocurrir en este lado del mundo, te equivocas. En Islandia los duendes son todo un tema e incluso hubo una ocasión en que sus defensores lograron detener una importante construcción argumentando que afectaría el hogar de dichas criaturas.
Si no puedes superar a los aluxes, no creerás lo que pasó en Islandia por los derechos de los duendes

Todo comenzó a finales de 2013 cuando un proyecto de infraestructura carretera de la ciudad de Reikjavik se vino abajo. El motivo, más allá de los riesgos ambientales, era que la construcción afectaría el hogar de múltiples duendes.

Así como lo lees: el grupo Friends of the Lava, compuesto por egresados de la Elf School de Islandia y firmes defensores de los "derechos de los duendes" presentaron una serie de documentos ante el Tribunal Supremo de Islandia y ante el Departamento de Tránsito para que la construcción se detuviera.
Las protestas también llegaron a ser físicas, ya que varios miembros de este grupo bloquearon por días el trabajo de las maquinarias y se presentaron en diversas televisoras para exigir el cumplimiento de sus exigencias. El movimiento pronto logró reunir firmas y simpatizantes suficientes para que la construcción retrocediera de manera permanente.
¿Dónde viven los duendes?

De acuerdo con el folclore escandinavo, los duendes permanecen entre nosotros (bueno, en realidad entre los europeos), particularmente les agrada vivir bajo puentes, rocas o junto a ríos de cauce tranquilo.
Por ello en Islandia no es raro ver casitas pequeñas en las zonas rurales. Estas se construyen como ofrenda a estos pequeños seres y son objetos de gran curiosidad para los turistas.

En nuestros días la mayoría de las personas en Dinamarca, Suecia y Noruega son escépticos respecto a su místico pasado con los duendes, trolls o elfos, pero en Islandia estas criaturas son un tópico serio y existen escuelas específicas para el estudio de su comportamiento.
De hecho, una encuesta de la Universidad de Islandia en 2007 reveló que el 62 % de mil sujetos encuestados creía que era posible que existieran duendes y que se manifestaran a través de "huldufólks" (término islandés para definir un comportamiento que no se percibe a simple vista).
Aún en la actualidad las autoridades no han revelado cuanto costó el traslado de obra y demás indemnizaciones derivadas de la obra suspendida, pero si llegaron a citar que además de atender las peticiones del grupo "pro-duendes", prefirieron evitar las "travesuras" que realizan estas místicas criaturas cuando son molestadas.
¿Qué opinas de estas medidas?, ¿te dan ganas de visitar Islandia justo ahora? Si lo haces no olvides visitar respetuosamente los hogares de los duendes.
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