Aunque no seas consciente de los cambios que un viaje puede producir en ti, es necesario que conozcas las importantes transformaciones y el enriquecimiento que una experiencia como viajar puede tener en una persona, principalmente cuando se es joven.
¿Sabías que viajar te cambia para siempre? ¡AVERIGUA POR QUÉ!


Por lo tanto, además de aconsejarte que realices al menos un viaje por año (si puedes), es importante que conozcas cómo un viaje puede influir positivamente en tu vida.

Abres tu cabeza y no vuelve a cerrarse
Cuando viajas, principalmente la primera vez, descubres un mundo que hasta el momento no sabías que existía. No importa cuán lejos vayas; verás un montón de cosas y tendrás múltiples experiencias nuevas.
Desde cómo se siente volar en avión y hablar en un idioma que no es el tuyo, hasta encontrarte con personas de una cultura muy diferente.
Y todo eso provoca que tu mente se expanda, y no vuelva a su forma original. Adquieres otra idea del mundo.

Te fortaleces
El viajar es prueba de superación, más que nada cuando lo haces de forma individual. La diferencia con las pruebas cotidianas es que esta tiene efectos permanentes en ti, ya que una vez que las pasas, no vuelves a ser la misma. Implicará enfrentarte a diferentes desafíos y situaciones por las que nunca antes habías pasado. Y con todo eso te harás más fuerte y te dará mayor confianza para seguir tu vida a pleno.
Jamás olvidas esa increíble experiencia y por lo tanto nunca más te debilitas.

Independencia sin vuelta atrás
Una vez que has vivido durante un tiempo sola, o de manera independiente de tu familia, no puedes volver a depender de ellos.
Ya que el haber cuidado de ti durante tanto tiempo, te vuelve más segura y de ahora en más no quieres que otras personas lo hagan.

Introspección personal
Por más inconsciente que sea este proceso, desde el momento en que abordas al avión hacia tu destino, comienzas a realizar un conocimiento de ti misma que nunca antes habías tenido la oportunidad de hacer.
Si viajas sola, ese proceso será mucho más intenso y notorio, ya que tendrás el tiempo suficiente para analizar aspectos de tu vida que probablemente nunca antes te habías cuestionado, o replantearte muchas cosas que tendrán un impacto permanente en tu vida.

Recuerdos y memorias
Si bien luego de un viaje sí o sí retomas tu rutina, guardas en ti numerosos buenos momentos que viviste y que seguramente te generen mucha nostalgia.
Estos recuerdos te ayudarán a seguir adelante y servirán como motivación para enfrentar situaciones difíciles en la vida y luchar por lo que realmente quieras.

Decisiones definitivas
Probablemente, si nunca antes habías viajado y tu viaje fue un descubrimiento total, tomes determinadas decisiones en base a él. Es decir, antes de saber que existía un mundo tan diferente al tuyo tu forma de pensar era una y tus decisiones sobre cómo querías vivir eran unas.
Pero ahora que sabes que tu mundo no es lo único que existe en el planeta y que hay otros muy interesantes, es posible que hayas decidido que no quieres vivir la vida que antes creías que era la mejor y cambies tus opciones por otras que definirán tu vida de otra manera.
Si todavía tienes dudas sobre los cambios definitivos que la experiencia de un viaje puede tener en ti, deberías probarlo por ti misma para confirmarlo. Te aseguro que no te decepcionarás.
Vea también: 8 razones para abandonar todo y VIAJAR







