La pasión por los paisajes naturales de cualquier turista alcanza uno de sus puntos máximos de conexión al llegar al territorio italiano, un sitio donde la naturaleza y la mano del hombre se estrechan con fuerza para forjar paisajes de mágico ensueño. En Italia, la naturaleza combinada con el trazo del hombre han dado lugar a auténticas postales turísticas que encuentran en sus lagos y alrededores manifestaciones verdaderamente perfectas.
Rutas por los lagos de Italia: Lago Maggiore

Hoy quiero invitarte a conocer uno de los lagos más pintorescos del territorio italiano para conocer de cerca los maravillosos paisajes que este país tiene para ofrecer. La región de Lombardía es nuestro punto de partida, acompáñame para apasionarte conociendo los lagos y sus alrededores, concretamente el Lago Maggiore.
El Lago Maggiore y sus alrededores

La recorrida comienza por Laveno que, cerca del Lago Maggiore, alberga esta villa en la que se nos da la oportunidad de acceder a la montaña de Sasso di Ferro a través de un fantástico teleférico lleno de aventura y adrenalina. En Cerro, a tres kilómetros de Laveno, podemos visitar el museo de cerámica, que recoge su larga tradición en este arte y que nos permite un momento cultural en el recorrido.
Continuando con nuestro colorido camino, llegamos al pueblo de Luino, con un pequeño y pintoresco centro histórico en el que necesariamente hay que visitar la iglesia de la Virgen del Carmen y la iglesia románica de San Pedro, que con su hermoso campanario, son 2 lugares que no puedes quedarte sin conocer, de ninguna manera.
Otros sitios que tienes que visitar a orillas del Maggiore

Angera, luego, y Ranco, municipalidad lombardina de la provincia de Varese, son algunos de los otros destinos a conocer a orillas del Maggiore. Estos dos lugares cuentan con varios museos para conocer y entre las principales atracciones del lugar, podemos contar el castillo de la Rocca Borronea, un sitio único e inolvidable.
Si vas a conocer esta magnífica ruta, también te recomiendo que tomes un coche y que dediques al menos un día entero a conocerla, te aseguro que este esfuerzo va a valer la pena. Si bien no es demasiado larga, la cantidad de postales que registrarás aquí son incontables, y tomarte tu tiempo para apreciarlas con paz y tranquilidad es una consigna fundamental para disfrutar de este mágico viaje.







