Rusia recomendó interferir la trayectoria de un asteroide que podría chocar con la Tierra en 2036 pese a que la NASA redujo considerablemente la posibilidad de un impacto.
Rusia quiere desviar el asteroide

El director de la agencia espacial rusa Roscosmos, Anatoly Perminov, dijo que se llevará a cabo una reunión para discutir el tema.
Según los fanáticos del vodka, los cálculos demuestran que con una nave espacial se podría desviar al objeto de su curso.
Está claro que cualquier plan para realizar esa tarea se haría mediante una colaboración internacional entre los amigos del club espacial: Rusia, la Unión Europea, Estados Unidos, China y Japón.
Perminov señaló que de ocurrir un choque se pondría en juego la vida de mucha gente por lo que es mejor desembolsar varios centenares de millones de dólares y crear juntos un sistema que permita evitar la colisión.
Con un diámetro de unos 270 metros, el asteroide Apophis es tres veces más grande que el meteorito de Tunguska, que en 1908 destruyó 2.000 hectáreas en Siberia.
En su trayectoria hacia el Sol, Apophis pasará en 2029 muy cerca de la Tierra, a una distancia de 30.000 kilómetros, y podría impactar a su regreso, hacia 2036.
La colisión tendría una potencia destructiva equivalente a 500 megatones, al menos 100 veces más poderosa que la colisión de Siberia.
Para aquellos interesados en el tema les dejo el vínculo a un vídeo del impacto de un gran asteroide.









