Rabat, la bella capital de Marruecos se extiende sobre una superficie de casi 120 kilómetros cuadrados. Está situada de cara al Océano Atlántico, sobre la orilla sur de la desembocadura del Río BuRegreg (desde el siglo III antes de Cristo) y es la segunda ciudad en importancia detrás de Casablanca. El Aeropuerto de Rabat-Salé está ubicado a siete kilómetros de ella.
Rabat, la bella capital de Marruecos


Palacios y mezquitas
Cuenta con más de cincuenta mezquitas, la mayoría de las cuales fue construida por la dinastía actual.
De sus edificios más antiguos se conservan aún la Torre Hassan, de 44 metros de altura; la Fortaleza de los Udaia; el Mausoleo de Mohammed V; la Necrópolis de Chella; la Mezquita de Agdal; la Catedral de San Pedro y el Palacio Real o Dâr-al-Mahkzen.
La Torre Hassan es un símbolo dentro de la ciudad y el país entero, es de hecho el minarete jamás terminado de la que iba a ser no sólo la mezquita más grande de Marruecos sino el edificio religioso de mayor tamaño en el mundo entero.
Las obras comenzaron en el año 1196; el representante en ese momento de la Dinastía Almohade, Yacoub El Mansour, quería convertir a Rabat en la capital de su imperio, pero desafortunadamente murió tres años después y no pudo ver cumplidos sus sueños.
Sus sucesores perdieron el interés en continuarla, los materiales fueron saqueados y un terremoto en el año 1755 derribó parte del trabajo. Delante de la torre se encontraba el oratorio, pueden verse aún los restos de las columnas de mármol; otras 312 columnas y 44 pilares completaban el edificio que contaba con 14 puertas.
Monumentos memorables
La hermosa Catedral de San Pedro, cuya piedra fundamental se colocó en el año 1919, aún funciona celebrando su misa dominical.
El Palacio Real, en el que trabajan y residen más de dos mil personas, es de construcción reciente pues data de mediados del siglo XIX, ya que fue erigido sobre las ruinas del palacio anterior; lamentablemente ya no se permite el acceso al público a los bellos jardines que lo rodean por razones de seguridad.
El Mausoleo de Mohammed V, padre de la independencia de Marruecos, se alza en la explanada de la Mezquita de Hassan, está construido en mármol blanco italiano y lo remata una cubierta piramidal de tejas verdes, dentro del clasicismo más puro; una escalera desciende hacia la cámara funeraria, gran sala cuadrada debajo de la cúpula, rodeada por una galería desde la que el público venera los restos de quien fuera su rey, acompañado por los de dos de sus hijos, el Rey Hassan II y el Príncipe MoulayAbdellah.
Rabat es una ciudad sobria y profundamente religiosa, limpia y ordenada, donde el descanso se puede disfrutar, visitarla es siempre un gran placer.
¿Conocían sobre Rabat? ¿Visitarían este sitio?







