¡Qué MISTERIO! 4 lugares donde podría estar El Dorado

En el año 1530 un rumor comenzó a flotar por las montañas de Los Andes. Una ciudad bañada en oro yacía oculta en algún lugar de Sudamérica y los conquistadores españoles, quienes ya habían encontrado bastas cantidades de oro durante sus primeras expediciones, no lo dudaron ni un segundo a la hora de partir hacia este reino oculto en algún lugar del continente.

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Muchos murieron buscándolo, otros creyeron quedarse a sus puertas y unos pocos aún siguen preguntándose si habría oro en alguno de estos 4 lugares donde podría estar El Dorado

Lago Guatavita

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La leyenda de El Dorado comenzó en este lago, situado al norte de Bogotá y donde se extendían los antiguos dominios de las tribus muicas. Este pueblo era famoso por los rituales al rey indio, al cual rociaban de polvo de oro, mientras otros cargaban una balsa con gemas preciosas y las lanzaban en mitad del lago bajo el sol, a modo de ritual a sus dioses.

Los españoles pensaron durante años que en las profundidades del lago yacía El Dorado, si bien los indígenas se encargaron de señalar que estaba en otros lugares para alejarlos de sus tierras. 

Paititi

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En 2001 fue develada una carta oculta en El Vaticano en la que un jesuita español del siglo XVI, Andrés López, confirmaba que los propios indígenas de Los Andes buscaban una ciudad dorada en la selva de Pantiacolla, al norte de Cuzco.

Según rezaba el escrito los incas creían que el dios Inkari había creado la ciudad de Cuzco (llena de oro) y posteriormente se había retirado a Paititi, lugar que aún hoy día continúa siendo un misterio para los arqueólogos.

López finalizó la carta asegurando que los jesuitas que conocían este hecho no dijeron nada a fin de no desatar una fiebre del oro entre los conquistadores. 

Lago Titicaca

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Según la leyenda, los indígenas que seguían al rey Atahualpa de Los Andes se hicieron con todos los tesoros del imperio y los escondieron en algún lugar de la selva, en concreto en  las profundidades del lago Titicaca que confluye entre Perú y Bolivia.

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Las muchas expediciones que atravesaron Sudamérica en busca de continuas leyendas también se aproximaron hasta el famoso lago de los indígenas.

Recientes investigaciones han confirmado que en las profundidades del lago hay más de una figura dorada, pero el acceso a ellas es complicado debido a los veinticinco minutos que un buceador puede resistir en el fondo del mismo. 

Lago Parima

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La cuenca del Orinoco separa los territorio de Guayana y el Amazonas y está considerado uno de los lugares más antiguos de la población indígena de Sudamérica.

A través de sus densas selvas y mesetas, el explorador inglés Sir Walter Raleigh también inició en 1595 su propia expedición en busca de El Dorado en el corazón de Guayana, en un lago llamado Parima que nunca nadie descubrió y que, según posteriores testimonios, podría haberse originado durante un período de inundaciones.

La búsqueda de El Dorado en esta zona marcó el declive de unas expediciones que ya daban por fracasados los planes de encontrar la ciudad en la zona andina. 

Estos 4 lugares donde podría estar El Dorado continúan alimentando uno de los grandes enigmas del período de la conquista de Sudamérica, continente cuya naturaleza, cultura y misterios consiguió confundir a hombres ávidos de dinero y poder.

¿Seguirá El Dorado en algún lugar?

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