¿Qué dice la ciencia sobre la dieta Paleo?

A pesar de que parece que en algunas cosas la raza humana fue involucionando, una buena parte del campo de la nutrición apunta a la dieta paleolítica como fuente de beneficios para la salud. La conocida como dieta Paleo se remonta al Paleolítico, aquella etapa de dos millones de años en los que nuestros ancestros de las cavernas se alimentaban con los nutrientes que aportaba la naturaleza para subsistir.

¿De qué se compone una dieta Paleo?

Una ingente cantidad de estudios nos advierten desde hace años años que las dietas modernas, basadas en alimentos refinados, azúcares y grasas, son el caldo de cultivo de importantes afecciones, tales como la obesidad, el cáncer, la diabetes, enfermedades cardíacas, Parkinson, Alzheimer, depresión e infertilidad. Básicamente, la dieta paleo se compone de de proteínas magras, frutas, verduras, grasas saludables de los frutos secos, semillas, aguacates, aceite de oliva, aceite de pescado, y carne de pastoreo. 

Sin duda, el aspecto más polémico de la dieta Peleo es el consumo de grasa saturada, sobre todo porque esta ha sido demonizada masivamente. Respecto a ello, el equipo de investigación dirigido por el profesor Cordain, se ha centrado en las cantidades y tipos de grasas saturadas que componen la dieta del Peleolítico.

Las conclusiones de este enfoque señalan que la gran desviación que existe en nuestra dieta moderna radica en el tipo de carne que se consume. Cordain remarca que la cantidad y el tipo de grasa que contienen los animales actuales es menos beneficiosa debido a su alimentación con granos. Mientras tanto, las carnes que consumían nuestros ancestros provenían de animales salvajes, y por ende, alimentados de pastos o carne de otros animales silvestres, pescados y aves.

En definitiva, las carnes que se consumían en el Paleolítico estaban casi completamente liberadas de grasas saturadas, por lo que eran magras y contenían cantidades significativas de ácidos grasos omega-3 (EPA Y DHA).

¿Cuáles son los beneficios de la dieta paleo para la salud?

Pese a que ha cosechado detractores, los defensores de la dieta paleo argumentan que la misma es la forma más saludable de comer, sobre todo porque contiene los alimentos para los que el hombre está mejor preparado genéticamente, además de ser esencial para mantenerse delgado, fuerte y lleno de energía.

El objetivo último de las investigaciones sobre la dieta paleo es verificar el nivel de beneficio para la salud. Los científicos tienen claro de que las proteínas magras refuerzan los músculos, propician huesos sanos, ayudan a la activación de la función inmune, y producen saciedad entre comidas, lo que evita una ingesta desproporcionada.

Las siempre recomendables frutas y verduras son ricas en antioxidantes, vitaminas, minerales y fitonutrientes. Todos disminuyen el desarrollo de enfermedades degenerativas como el cáncer, la diabetes o el deterioro neurológico. 

Por su parte, las investigaciones nutricionales y epidemiológicas han constatado que las dietas ricas en grasas monoinsaturadas y grasas omega-3 combaten ferozmente el desarrollo de la obesidad, el cáncer, la diabetes y el deterioro cognitivo.

¿Te consideras partidario de la dieta Paleo o más bien detractor? ¿Quieres saber más sobre cómo vivía el hombre del Paleolítico?