Resulta curioso como cada país del mundo lleva perpetuando determinadas costumbres desde hace siglos y cómo estas comenzaron a forjarse debido a un conjunto de casualidades e influencias. Este es el caso de la famosa hora del té que caracteriza a los habitantes de Reino Unido, un clásico ritual que confirma la pasión de los ingleses por el té con leche, entre otros muchos modos de prepararlo. Iniciamos uno de nuestros artículos más curiosos y te invitamos a conocer por qué los ingleses beben tanto té.
¿Por qué los ingleses beben tanto té?

Tea time
El té con leche (o agua) acompañado por galletas de mantequillas o sándwiches de pepino conforman la dieta vespertina de los ingleses, adictos a esa hora del té conocida en todo el mundo. Un momento ideal para relajarse durante la tarde y degustar esta bebida caliente que tan bien sienta cuando vives en un país de temperaturas generalmente bajas.
La hora del té constituye el perfecto break entre desayuno y cena, consumiéndose entre las 4 y las 7 p.m. dependiendo del horario y la estación del año. Para quienes trabajan, este momento supone una pausa para llenar con algo el estómago antes de la cena, mientras que aquellos que no lo hacen lo conciben también como un perfecto motivo de reunión social.
A pesar de la libertad con la que hoy día cada hotel, residencia u hogar decide cómo y en qué momento se toma el té, antiguamente la hora para tomarlo era exactamente a las 4 p.m. A finales del siglo XVIII, con la llegada de la industrialización, las cenas de aristócratas y trabajadores comenzaron a retrasarse cada vez más, dejando un amplio margen entre desayuno y cena que debía colmarse con algún ligero bocado. A pesar de ciertos aperitivos, la séptima duquesa de Bedford, Anna Russell, decidió, alrededor del 1840, que la combinación de té con pastas o alimentos salados era perfecta para aguantar el hambre hasta la noche.
Otros aseguran que, debido a un ligero malestar que la duquesa Russell experimentó, pidió una taza de té como remedio y, tras recuperarse, perpetuó la costumbre de tomarlo a las 4 de la tarde durante los días sucesivos, invitando a otras señoras de la alta sociedad a consumir té, concretamente, Darjeeling, uno de los principales exportadores indios y chinos durante el imperialismo británico, razón por la que esta bebida comenzó a tener gran influencia en Reino Unido.

Estamos invitados a tomar el té
Casi un siglo antes, en 1660, el té llegaba a Reino Unido gracias a la nueva mujer de Carlos II, Catherine de Braganza, una joven de la familia real portuguesa que llevaba siempre consigo bolsas de té y quien impulsó el consumo de esta bebida en la corte real, si bien este era aún un producto caro y difícil de adquirir.
Algunas fuentes afirman que el posterior desarrollo de la costumbre del "té de las cuatro o cinco de la tarde" impulsado por la duquesa de Bedford comenzó mucho antes, en el siglo XVII, a juzgar por las numerosas referencias encontradas en libros y comedias como La excusa de las mujeres, de Mr. Southerner, publicada en 1692.
Posteriormente, la costumbre fue trasladándose a las demás clases sociales que, en mitad de sus jornadas, tomaban una taza de té acompañada de sandwiches de carne o pepino, pasteles de chocolate o galletas varias.
Hoy día, esta costumbre se ha convertido en uno de los rasgos más populares de la sociedad británica y, posiblemente, en la entrada europea de tan exótica bebida como es el té, consumido de forma masiva en nuestros días aunque no superen, ni de lejos, la marca inglesa: 165 millones de tazas de té diarias.
Y, hablando de esta deliciosa bebida, seguro que te encantarán estos destinos para los amantes del té que hemos elegido para ti.
Los ingleses beben té como resultado de numerosas influencias coloniales que trajeron el té a la corte real del país para, después, convertirse en el mejor motivo para una merienda o descanso durante la tarde, tanto para las damas de la corte como para la clase obrera que perpetuó el consumo de esta bebida hasta nuestros días. Nuestro consejo es que, si viajas a Londres, no dejes escapar la oportunidad de degustar un delicioso té con pastas en cualquier cafetería o casa de té que encuentres a media tarde. Solo así podrás equipararte a los verdaderos ingleses.
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