En Argentina, ocurrió un crimen que generó cierta confusión mediática en torno a qué es la violencia de género. Por tratarse de un caso que tomó mucha repercusión y de un tema sumamente delicado, nos detenemos a explicar en detalle por qué no deberíamos llamarlo así.
Por qué el crimen de Nahir Galarza NO es violencia de género

CONFIRMADO: Nahir Galarza fue condenada a prisión perpetua por el crimen de Fernando Pastorizzo https://t.co/kEEViq06F9 pic.twitter.com/aRhHvXC6JV
— LA NACION (@LANACION) July 3, 2018
El crimen de Fernando Pastorizzo
Nahir Galarza de 19 años, fue condenada a prisión perpetua según informó La Nación por el crimen de su novio Fernando Pastorizzo (20) , que falleció en diciembre del año 2017 en la ciudad de Gualeguaychú, provincia argentina de Entre Ríos.
Según determinó la justicia, Nahir tomó el arma de su padre policía y mató de dos disparos a Fernando en plena calle. Quedó ratificado durante el proceso que los jóvenes eran novios y que el disparo no fue accidental.
El caso fue el que más repercusión mediática tuvo en los últimos meses en el país y la sentencia fue histórica, tal como publicó Perfil, ya que desde la vigencia del actual Código Penal argentino, es la primera vez que una mujer menor de 20 años recibe tal condena.
El Tribunal que condenó a Preision Perpetua ordenó que permanezca en prisión preventiva -prorrogaron-en la Comisaría de la Mujer de #Gualeguaychu hasta que la sentencia quede firme o resuelva la Cámara de Casación Penal.Nahir Galarza no fue a escuchar la sentencia en la sala. pic.twitter.com/RVnoXiip0B
— Ignacio González Prieto (@igonzalezprieto) July 3, 2018
¿Por qué NO se trata de un crimen de violencia de género?
El término violencia de género de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, se utiliza «para distinguir la violencia común de aquella que se dirige a individuos o grupos sobre la base de su género».
Según explicó a VIX Natalia Mastrángelo, Licenciada en comunicación social especialista en género, y conductora del programa radial Código Feminista, este crimen de ninguna manera podría entrar en dicha categoría, ya que un caso de violencia de género ocurre solo cuando el crimen es motivado por una cuestión de género. Por lo que en este caso, solo se podría hablar de violencia de género desde el lado de Nahir Galarza (como ella argumentó en su defensa, que publicó La Nación).
Por lo tanto, en los crímenes en que una mujer mata a un hombre, debemos sacar al género del caso y juzgar cada hecho con su contexto y sus motivaciones propias, ya que la violencia de género por parte de mujeres hacia hombres no existe.
La Fiscalía pidió prisión perpetua para #NahirGalarzahttps://t.co/qdHsIg0aFE pic.twitter.com/dRWMuvwjxN
— El Día de Gchú (@eldiagchu) June 25, 2018
«El caso Nahir Galarza»
El crimen tuvo más repercusión que cualquier femicidio porque sale de lo normal: según estadísticas de la ONG La Casa del Encuentro, una mujer mue re cada 18 horas en el país solo por el hecho de ser mujer.
Existen mujeres violentas y mujeres asesinas, pero dada la magnitud de estos casos, actualmente no constituyen un problema social en el mundo (como sí lo son los femicidios) motivo por el cual este crimen perpetuado por una joven de clase media alta, tuvo muchísimo repudio social en los medios y en las redes sociales.
Cuando ocurre un femicidio los medios de comunicación titulan al caso con el nombre de la víctima. Si nos remitimos a casos que se hicieron públicos en Argentina, podemos referirnos al « Caso Ángeles Rawson» o « Caso Melina Romero». Cuando ocurre un homicidio, también: « Caso Bulacio»; « Caso Cabezas».
Este caso fue la excepción, y el tema fue titulado como « El caso Nahir Galarza» y no «El caso Fernando Pastorizzo».
El caso Nahir Galarza evidencia que sí existen relaciones violentas o «tóxicas» por parte de mujeres hacia sus parejas hombres, pero por la misma sociedad patriarcal en la que vivimos, no son denunciadas ni mucho menos visibilizadas debido a la gran condena social.
Por esta razón, debemos tratar de tomar conciencia sobre los múltiples casos de violencia de género que existen hoy en Argentina y en el mundo, y este caso puntual, para entender que el machismo es perjudicial tanto para mujeres como para hombres por igual.
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