¿Pensando en comprar una moto? Estas son las 5 cosas que deberías saber

Si hace meses que estás pensando en comprarte una moto y no sabés qué modelo elegir, este artículo es para vos. Prestá atención a estas  5 cosas que deberías saber antes de elegirla. ¿Todavía no estás seguro? Tenemos toda la información para que tu compra sea un éxito. ¡No te la pierdas!

1. Elegí el tipo de moto según el uso que le vayas a dar

Hay motos para todos los gustos, por eso es fundamental que te informes y busques en internet el modelo que mejor se adapte a tus necesidades. Por ejemplo, si tenés pensado moverte únicamente dentro de la ciudad o tenés que usar traje la mayor parte del día, entonces la mejor opción será un scooter. 

Por otro lado, si la vas a usar para recorrer distancias medias, tramos entre varias localidades o dependés de una autopista para llegar a tu destino, entonces deberás inclinarte por una moto de media cilindrada. 

En cambio, si tu idea es comprar una moto para recorrer largas distancias o irte de viaje mejor apuntá a una doble propósito: que circule tanto sobre asfalto, como en caminos no pavimentados. 

Por último, y no menos importante, asegurate de que tenga equipamiento de seguridad, cubiertas anchas, freno de disco y luces reglamentarias. Evitá los colores oscuros y priorizá los modelos que vengan con luces refractarias. 

2. Atención a la inspección visual de la moto

Este punto varía según la moto que vas a comprar: si es nueva o usada. En ambos casos, te recomendamos que prestes atención a los siguientes detalles que te dirán mucho sobre la moto que estás por comprar.

Revisá los discos de freno, el estado de los neumáticos y la cadena. Estas son las partes que más fácilmente se desgastan, por lo que deberás asegurarte de que estén en óptimo estado. ¿Cómo? en el caso de los neumáticos, las  marcas que figuran te ayudarán a saber cuándo tendrás que reemplazarlos. 

En el caso de la cadena,  agarrá algún eslabón de la corona trasera y tirá para atrás. Si ésta se separa fácilmente, probablemente tengas que cambiar no solo la cadena, sino también el piñón y la corona. 

Por otro lado, si querés comprobar si la moto pierde aceite, te recomendamos que frotes la parte inferior del cárter del motor con una hoja de papel higiénico o rollo de cocina. Si el papel sale manchado con aceite húmedo... estás en problemas.

Algunos vendedores también intentarán modificar el kilometraje de la moto. Para evitar una < >, revisá siempre las marcas en el switch de encendido: cuantas más haya, más uso tendrá. Otros indicios de uso los encontrarás en la dureza del manillar, la nitidez del parabrisas, la comodidad del asiento y el estado de los posa pies.

Los discos de freno tienen un espesor mínimo que varía según el modelo de la moto, asegurate de que tengan el tamaño indicado. Verificá en qué estado están de una manera sencilla: pasá tus dedos sobre ellos para palpar saltos o ralladuras. Si percibís la presencia de alguna de estas, probablemente necesites rectificarlos.

3. Ahora sí: A probar el arranque

Ya sea en una concesionaria privada o a un vendedor particular, siempre pedí realizar una prueba de encendido. Para esto, lo ideal es una prueba de arranque en frío para percibir el sonido del escape, la reacción del motor y la respuesta del acelerador.

Sin embargo, muchas veces el vendedor intentará arrancar el motor antes de que la revises ¡Ojo! Puede ser un signo de que no enciende bien. Si notás que el cárter del motor está más caliente que la llanta, seguro fue encendida antes de que llegaras, lo que implica un problema.

Si previo al arranque notás que el vendedor aprieta el acelerador un par de veces, es probable que la moto tenga problemas de carburación. Eso sí, no te asustes si sale un poco de humo blanco: esto es producto de la combinación de humo con vapor de agua y es totalmente normal.

Si percibís olor a aceite poné la mano en la salida del caño de escape y acelerá suavemente: si terminás con la mano manchada, quiere decir que el motor está quemando aceite, lo cual indica que está en muy mal estado.

Por último, puede pasar que al principio cueste arrancar la moto. Esto simplemente es un indicador de que la batería está baja y que no emite suficiente chispa para encender el motor.

4. Y... Ya podés salir a probarla a la calle

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Una vez que ya hayas revisado todo eso, te sugerimos que saques la moto a la calle para probar su funcionamiento. La marcha debe ser continúa, pareja y suave, de lo contrario podría indicar algo de tensión en la  cadena de distribución del motor.

También deberás prestar atención a las revoluciones del motor, sobre todo a la hora de acelerar. Si sentís que el motor se < > , entonces es posible que la batería de la moto esté a punto de descargarse.

La mejor forma de comprobar el estado de los frenos es realizando algunas frenadas fuertes. ¿Cómo? Primero con el trasero, luego con el delantero y finalmente, con los dos juntos . Esto también te ayudará a ver el estado de la suspensión. La misma deberá bajar y regresar a su posición original con suavidad. Si notás que esto no sucede, es probable que una de las horquillas no esté derecha y haga resistencia. Por otro lado, si ves que las mismas escurren aceite (lo mismo aplica para los amortiguadores), posiblemente haga falta cambiar los retenes.

Por último, si notás que la batería no recupera su carga, probablemente el regulador haya dejado de funcionar, por lo que también deberás estar atento a eso.

5. Por último, verificá la documentación

Este último apartado dependerá mucho de si es nueva o usada. En el caso de las motos usadas, asegurate de que en primer lugar que cuente con los papeles al día y en lo posible, un historial documentado del vehículo. Esto incluye factura de compra, mantenimientos realizados y la VTV.

Una vez superada esta instancia, tendrás que negociar un precio con el vendedor y firmar un contrato que detalle la información de la moto (modelo, marca, número de bastidor y de patente), el precio acordado con el vendedor y la fecha de la transacción.

Además, deberá contar con estas garantías:

• Acreditar el cambio de propietario por medio de la documentación y DNI del vendedor.
• Acreditar que la moto no tiene deudas por parte del propietario que la vende, ni está embargada.
• Una nota escrita por parte del vendedor asegurando que la moto no tiene caídas, ni fallas técnicas escondidas.

Con todo esto ya estarás listo para comprar la moto de tus sueños sin haber muerto en el intento. Eso sí: antes de salir a la calle con ella, recordá que primero deberás asegurarla. ¿Estás listo para la aventura? ¡El camino te espera!.

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