La palabra resiliencia tendría que tener el nombre de Oprah Winfrey a su lado en el diccionario. Es que quien hoy en día se convirtió en una magnate de la televisión, actriz, filántropa y una de las mujeres más poderosas del mundo superó barreras inimaginables en su juventud.
Oprah Winfrey: el ave fénix que renació de las cenizas una y otra vez

Un origen rural
En el documental MAKERS: The Women Who Make America, Winfrey nos cuenta su historia de vida. Hija de una madre adolescente soltera, Vernita Lee, Oprah nació en 1954 en un área rural de Mississippi. Durante sus primeros 6 años de vida, la actual presentadora de televisión estuvo al cuidado de su abuela, ya que su madre trabajaba como criada y no podía llevarla con ella.
La pobreza de esos primeros años era tal que su abuela hacía la ropa de la niña con la tela de bolsas de papas. En el documental, Oprah recuerda que su abuela creía que ella trabajaría como mucama, al igual que su madre, y que su sueño para ella era que consiguiera «una gente blanca buena» que la tratase bien. Pero Winfrey confiesa que, ya por ese entonces, sabía que su vida no transcurriría de esa manera.
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— Mike Scott (@MickPuck) January 6, 2018
Ave fénix
Cuando tenía 7 años, Oprah se mudó con su madre a Milwaukee. Allí, nos cuenta en la entrevista, sufrió reiterados abusos sexuales. Cuando tenía 9 años, su primo la violó y, al poco tiempo, cuando tenía 10, comenzó a sufrir abusos por parte de su tío y el novio de su prima. A los 14, Oprah decidió irse de su casa y comenzó a vagar por las calles. Por ese entonces, quedó embarazada. Por su joven edad, Winfrey ocultó su embarazo hasta el momento del parto. El bebé nació prematuro y murió al poco tiempo.
Pero ella no se quedó paralizada ante todos estos eventos traumáticos, sino que los usó para hacerse más fuerte: se concentró en sus estudios y terminó la secundaria con excelentes calificaciones que le valieron una beca en la Universidad Estatal de Tennessee. Ya a los 17 años, comenzó a trabajar en un programa de radio, al que concurría después de clases.
Oprah vs. la brecha salarial
In 1991 Oprah Winfrey testified before Congress in favor of a national registry to track child abusers. It became known as the Oprah Bill, and Bill Clinton signed it into law.
— Steven Senski (@StevenSenski) January 9, 2018
That's more legislative success than Bernie can ever claim. pic.twitter.com/br9R9VhKOk
A los 19 dejó la universidad luego de conseguir un trabajo como la presentadora más joven (y la primera conductora negra) de un noticiero en la cadena televisiva WLAC-TV de Nashville. Sin embargo, las dificultades para Oprah no terminaron con su llegada a la televisión. En su siguiente trabajo, cuando conducía el programa People Are Talking de Baltimore, Winfrey se enfrentó a la brecha salarial: su compañero, que hacía el mismo trabajo, ganaba más del doble que ella. Confrontó a su jefe al respecto, aunque sin éxito.
Más adelante, en 1984, la contrataron para conducir el programa AM Chicago, que al año cambiaría su nombre para convertirse en el tan conocido The Oprah Winfrey Show. Cansada de que los sueldos de los hombres fueran mayores a los de las mujeres, en 1988 Oprah fundó Harpo Studios para convertiste en dueña de su propio show y poder determinar los salarios de su equipo.
El cielo son los otros

Todos estos años la presentadora ha usado su programa como plataforma para hablar de temas que la afectaron a ella misma profundamente y que aún afectan a incontables personas en el mundo, como el abuso sexual en la infancia.
Por otra parte, en 2002 Winfrey fundó The Oprah Winfrey Leadership Academy for Girls, una institución educativa para niñas como ella misma: con muchísima capacidad para los estudios, pero que viven situaciones de vulnerabilidad social.
Y justamente ese es el mensaje más poderoso de Oprah: ayuda a otros que comparten las dificultades o experiencias traumáticas que alguna vez supo padecer para tender una mano amiga y, al mismo tiempo, sanarse a sí misma.
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