Con el doble de tamaño que el Gran Canyon, en Estados Unidos, el Cotahuasi de Perú es uno de los cañones más profundos del mundo. Su existencia casi pareciera estar gritándonos en idioma geológico cuán poderosa es la erosión del agua y el hielo así como de la actividad tectónica en nuestro planeta.
Olvídate del Grand Canyon: el Cotahuasi de Perú es uno de los más profundos del mundo

Y es que en el transcurso de millones de años, los ríos y glaciares del noroeste de Arequipa –sur del país– acabaron por cincelar en la meseta una honda garganta que todavía muestra en sus bordes coloridos depósitos volcánicos amarillos y naranjas.
El cañón del Cotahuasi: un paisaje espectacular a la vista

Desde el fondo hasta su borde, el cañón del Cotahuasi mide entre 2,5 y 3,5 kilómetros, casi el doble de profundidad que el Gran Cañón de Colorado, que ostenta algo más de 1.600 metros.
Esta situación privilegiada lo convierte en un paisaje espectacular ya que es capaz de albergar granjas andinas tradicionales, campos y terrazas, paredes escarpadas, barrancos profundos y restos de construcciones preincaicas e incas.
Su punto más profundo está cerca de la aldea de Quechualla, a 6 o 7 horas de la localidad de Cotahuasi. Cerca de allí se extiende el punto más alto: el extinto macizo volcánico del Nevado Solimana, con un pico que se eleva a 19,990 pies sobre el nivel del mar.
Grand Canyon: "I am so deep and grand!"
— NASA Earth (@NASAEarth) February 7, 2018
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Al ser un paraje tan remoto mantiene los encantos de lo que pudiera ser una tierra virgen. Tiene 12 ecosistemas que incluyen especies únicas de flora y fauna de un valor incalculable, entre las que destacan los cóndores andinos.
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La Reserva Paisajística del Cotahuasi
El profundo cañón se encuentra protegido por la Reserva Paisajística Subcuenca del Cotahuasi, que comprende un área de aproximadamente 1,212.175 acres y no solo vela por la flora y fauna locales, sino que además favorece un estilo de vida tradicional sustentado en los cultivos de los habitantes de la región.
Según imágenes del Radar Topográfico de la NASA, la ecología del cañón es vertical y se producen transiciones de acuerdo a las condiciones ambientales de cada nivel. La base es una zona cálida donde se cultivan frutas, principalmente la uva.
Más arriba ya el cultivo dominante es el maíz, así como la kiwicha, la quinua y el tarwi. Por encima se ubican zonas más frías y altas, donde el cultivo más importante es la papa y otros tubérculos.
Sin embargo, en la cima de la meseta no es posible cultivar nada, pues se trata de una zona muy árida y fría, lo que obliga a los campesinos a criar alpacas, llamas, ovejas y ganado vacuno. Los habitantes de Cotahuasi han conservado sus tradiciones y costumbres, los granjeros aún utilizan herramientas antiguas y realizan rituales ancestrales para proteger la tierra y traer abundantes cosechas.
Aunque este cañón es ideal para hacer rafting, alpinismo y montar kayak, lo cierto es que su profundidad, los numerosos rápidos del río Cotahuasi y lo escarpado de su paisaje lo convierten en un lugar desafiante en el cual hay que ser muy cuidadosos.
Una visita a Cotahuasi resulta todo un espectáculo y es casi obligatoria para aquellos que sean los suficientemente aventureros como para querer recorrer uno de los cañones más profundos del mundo.
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