El Imperio Romano estuvo gobernado por varias crápulas, como Nerón, Calígula y Heliogábalo, pero también hubo buenos sujetos al frente del gobierno. Estos 5 son llamados los «cinco buenos» y gobernaron uno detrás de otro, entre el 96 y el 169, haciendo de esos 73 años la mejor época de Roma.
No todos fueron malos: 5 buenos emperadores del Imperio Romano


1. Nerva
Marco Coceyo Nerva gobernó solo dos años, entre 96 y 98, pero le alcanzaron para bajar los opresivos impuestos, permitir el regreso de los exiliados, actuar con más justicia con los cristianos y construir escuelas para los niños de menores recursos. Uno de sus aciertos fue elegir como sucesor a Trajano, a quien había adoptado como hijo.
2. Trajano

Marco Ulpio Trajano gobernó entre 98 y 117 y fue el primer emperador de origen hispano. Fue un gran constructor y aún se conservan el Arco y el Foro de Trajano. También era un excelente relacionista público. Saludaba a todos los senadores uno por uno y se mezclaba en las calles a caminar con el pueblo.
Después de él, cuando un emperador juraba, el senado le decía « Que lo hagas mejor que Trajano» Era tan bueno que el cristianismo lo incorporó a sus filas después de muerto: El Papa Gregorio I lo «resucitó» y lo bautizó como cristiano.
3. Adriano
Publio Elio Adriano sucedió a su tío y maestro, Trajano, gobernando entre 117 y 138. Fue el emperador que más viajó por el imperio, conociendo los problemas de las provincias en persona y asegurándose de que fueran atendidos. Llevó tecnócratas al gobierno, expandió la beneficencia pública y se preocupó porque el ejército comiera y durmiera bien. Construyó el Muro de Adriano para proteger a los británicos de los « bárbaros del norte».
4. Antonino Pío

Se dice que este hijo adoptivo de Adriano era tan escrupuloso con el dinero del Estado y tan enemigo de derrocharlo, que a veces prefería financiar algunos gastos públicos de su bolsillo. Terminó varias obras dejadas inconclusas por emperadores anteriores y se preocupó por hacerle mantenimiento a caminos y puentes. Le otorgó recursos a las provincias, vigilando que los fondos fueran bien utilizados. Fue sucedido por sus hijos adoptivos Lucio Vero y Marco Aurelio, primeros coemperadores de Roma.
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5. Marco Aurelio
Gobernó junto a su hermano adoptivo Lucio Vero desde 161 hasta que éste murió en 169, luego fue emperador en solitario hasta 177 y finalmente reinó al lado de su hijo Cómodo hasta 180. Es paradigma del gobernante intelectual por haber sido uno de los grandes representantes de la filosofía estoica. Su obra Meditaciones, que escribió mientras estaba en una campaña guerrera, es considerada una pieza maestra de la política en la antigüedad. Fue también un gran filántropo.
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