Bordeado por el Océano Índico al este, por Tanzania al norte, Malawi y Zambia al noroeste, Zimbabue al oeste, y Sudáfrica al sudoeste, Mozambique aún logra destacarse de entre este enorme grupo, un país repleto de maravillas naturales y una sorprendente voluntad para hacer que sus visitantes se sientan como en casa. Uno de los países más seguros del mundo, Mozambique también es el trigésimo quinto más grande del planeta (mide 801.537 kilómetros cuadrados), comparable en tamaño con Turquía.
Mozambique, la maravilla africana

Luego de su Independencia se realizaron muchos cambios, como el nombre de la capital, previamente llamada Lourenço Marques y ahora conocida como Maputo, uno de los destinos más visitados del país.
País de fantasía
Mozambique es reconocido mundialmente por sus recursos naturales, de gran valor y amplia extensión, con la economía del país basándose principalmente de la agricultura (aunque la industria alimenticia y de manufactura de productos químicos está en auge).
Uno de los puntos fuertes del país es que el sector del turismo también está en creciente expansión, con gran parte de los visitantes proviniendo del país hermanado Sudáfrica, aunque también se cuenta gran cantidad de turistas de Portugal, España, y Bélgica cada año.
Como mencionamos previamente, el país se ubica en la costa sudeste de África, y está dividido en dos regiones topográficas cercanas al Río Zambezi, muy marcadas y diferentes entre sí. Al norte del río nos podemos encontrar con las estrechas costas, colinas, y mesetas bajas, para adentrarse luego con tierras más altas, así como las de Niassa, Namuli, Angonia, Tete, y la Meseta Makonde. Al sur del Zambezi, la plataforma decrece y se ensancha, formando así la Meseta Mashonaland y, más al sur, las increíbles Montañas Lebombo.
Tesoro africano
Por Mozambique corren cinco ríos principales y varios otros más pequeños, con el Zambezi siendo el más importante y el único reconocido en todo el mundo. En menor extensión, el país posee cuatro lagos notables: Lago Niassa, Lago Chiuta, Lago Cahora Bassa, y el Lago Shirwa. Casualmente, todos están ubicados al norte de la región. Sin embargo, si el agua no es lo que desean visitar sino las ciudades, las más grandes del país son Maputo, Beira, Nampula, Tete, Quelimane, Chimoio, Pemba, Inhambane, Xai-Xai, y Lichinga.
Si no nos creen que Mozambique es un gran país para visitar, es sólo cuestión de destacar que la industria turística del país viene creciendo desde la década de los ’90, la de mayor ascenso en todo el planeta. Además, muchas de las atracciones turísticas emplean a gente local y, con sólo una visita, podrás ver las maravillas de la zona y dar empleo a al menos 32.000 personas.
A pesar de haber sufrido muchas bajas arquitecturales durante las muchas guerras que se llevaron a cabo en el país, las reservas naturales de Maputo y los Parques Gorongosa aún se mantienen en pie, y son perfectos representantes de la mística belleza de Mozambique.
¿Han visitado Mozambique alguna vez? ¿Querrían hacerlo?







