Mail Order Family: la serie de comedia sobre tráfico de personas que nunca vio la luz

Estamos en la era dorada de la televisión. Si no lo creen por la cantidad impresionante de series y programas nuevos que surgen constantemente, tal vez el hecho de que las estrellas del cine se están mudando a la pantalla chica.

La llegada de las producciones de empresas como Netflix o Amazon, subió las apuestas en la creación de la programación para TV. Cada vez se hace mejor televisión y ya no se aceptan errores ni clichés tristes.

Ahora exigimos series de calidad, con representación justa e historias bien contadas. Uno pensaría que las cadenas que solían tener el monopolio de estas programaciones que se ven en casi todo el mundo, deberían haber recibido un llamado de atención con el auge de la TV streaming y las exigencias de una audiencia que sabe que puede ver producciones fantásticas.

Pero parece que todavía están procesando la información. Un ejemplo es el caso de NBC y la serie que no fue: Mail Order Family. Ésta iba a estar en manos del equipo productor de Superstore, una comedia entretenida protagonizada por America Ferrera. Y que contaría en formato de sitcom la historia de un viudo que compra una esposa filipina para criar a sus hijas.

Se supone que esto se basa en las experiencias reales de la comediante Jackie Clarke, que además en alguna ocasión explicó lo terrible que fue esa relación. De hecho, ya Clarke había usado esta historia en un episodio de This American Life.

La propia Clarke fue señalada por viejos posts en blogs, con comentarios terriblemente racistas y homofóbicos. Donde particularmente parecía ensañada con las mujeres asiáticas:

Pero obviando los comentarios racistas del pasado, y los propios en los que ella misma decía que su padre " no era una buena persona" o como aquel matrimonio con Pura (la novia filipina) " fue un infierno", hay que pensar: ¿Cómo es que la idea del tráfico de seres humanos pasa como comedia en estos días?

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Porque eso es lo que es. Comprar una novia de otro país, especialmente uno que tiene el clima político que tiene Filipinas, es eso, tráfico de seres humanos. No hay otra forma de verlo. Estas mujeres no "se venden" voluntariamente. Y si lo hicieran sería forzadas por una necesidad espantosa.

¿En serio, NBC? ¿Una comedia familiar sobre tráfico sexual de una mujer asiática?

La relación no tiene forma de ser justa, igualitaria, o sana. Pero NBC pensó que sería una idea graciosísima. La risa se les acabó con el horror del público que tomó las redes sociales para manifestar su decepción y rabia.

La alianza filipina feminista en Estados Unidos: Gabriela USA, creó una petición online para exigir la cancelación de la serie. Todo esto fue suficiente para que NBC cancelara la serie apenas dos días después de darle luz verde.

https://www.instagram.com/p/BH4hQeihOFf/
Cada año hay mujeres que son traficadas a grandes eventos deportivos para ser vendidas como esclavas sexuales.

Eso, al menos, es algo positivo. Pero ¿es realmente necesario, en 2016, que lleguemos hasta ese punto. De que un escándalo social sea necesario para que los ejecutivos de la TV se den cuenta de que algo es terrible, como la idea de hacer una comedia sobre el tráfico humano?

Cuando la gente se queja por falta de diversidad, esta no es la respuesta. La representación tiene que ser justa y positiva y sustancial.

https://www.instagram.com/p/BCJi51AjEYw/
Cada 30 segundos una persona es víctima de tráfico humano.

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