A nadie le gusta perder por más que digan que lo importante es competir y los efectos de la derrota no solo se ven en el equipo o deportista sino que también en sus fanáticos.
Los efectos sobre la salud de los hinchas cuando su equipo pierde
Por:Univision
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Diferentes investigaciones científicas encontraron efectos negativos sobre a salud de los hinchas de equipos derrotados en competiciones deportivas y que van más lejos de tener mala cara al día siguiente cuando los fanáticos del rival se ríen en sus rostros.
¿Perdió tu equipo? La salud de sus hinchas está en riesgo
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Ponemos las esperanzas en que nuestro equipo o atleta favorito gane, pero el perder siempre es una posibilidad y además del enojo y las palabrotas al entrenador hay otras consecuencias para tu cuerpo.
Una investigación realizada en Francia determinó que los hinchas tienen un mal hábito los días posteriores a cuando su equipo pierde: consumir comidas poco sanas, altas en azúcares y grasas, asimismo aumentaban los crímenes, accidentes y peleas relacionadas con el alcohol.
Estos malos hábitos post derrota no solo pueden tener efectos a largo plazo, sino que también inmediatos. La misma investigación quizo saber qué pasaba en las ciudades a las que pertenecía el equipo que perdía el Superbowl , la final del Fútbol Americano.
En 2008 ese partido enfrentó a los New York Giants y New England Patriots, resultando vencedores los primeros. Durante la semana siguiente en Massachusetts, hogar del equipo perdedor las muertes relacionadas con problemas cardíacos aumentaron en un 20 %.
Efecto derrota: Más fuerte que el de los ganadores
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El ganar debería provocarnos todo tipo de sensaciones agradables, pero al parecer el perder nos afecta más.
Quienes ganan, ya sea en deportes o una elección política muestran un menor cambio emocional que quienes son derrotados, tal como se midió en las elecciones presidenciales norteamericanas en 2012.
El perder no solo es dañino para la salud sino que también para las percepciones sobre el rival. Una investigación realizada en Alemania midió cómo estudiantes de secundaria percibían a la selección oponente después de partidos en que jugaba el combinado de su país.
Si Alemania perdía los adolescentes mostraban una actitud negativa sobre el país rival y no solo en lo deportivo, sino que también con respecto a sus habitantes, costumbres y culturas. Si Alemania ganaba no habían cambios.
El efecto derrota siempre es más fuerte cuando la victoria se escapa por poco y cuando el rival es de un nivel similar al de nuestro equipo.
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