Los dinosaurios están entre las criaturas más fascinantes que han existido en la Tierra. Una de las características más llamativas de estos reptiles fue sin dudas el inmenso tamaño de muchas de sus especies, fenómeno que durante muchos años se ha explicado por algunos expertos como una consecuencia de la alta oxigenación del aire que respiraban. Sin embargo, parece que esta teoría podría ser echada por tierra y te vamos a contar por qué.
Los dinosaurios respiraban menos oxígeno
Investigaciones en resina fósil
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Los fragmentos de resina fosilizados son verdaderos tesoros para los estudios paleontológicos. Su popularidad entre el público general llegó a raíz del estreno del famoso filme Parque Jurásico, donde a partir de la sangre almacenada en un insecto atrapado en resina de aquel Período, unos científicos lograron revivir a los dinosaurios y posteriormente enfrentar sus consecuencias.
Pero volviendo a la realidad, un grupo de investigadores dirigidos por el geólogo Ralf Tappert ha vuelto a estudiar el mensaje oculto de las resinas fósiles para descifrar la composición química del aire que respiraban los dinosaurios.
Para ello, analizaron 412 muestras de resina fósil de yacimientos de todo el planeta con una antigüedad de hasta 220 millones de años. El ámbar ofrece una oportunidad única para estas investigaciones ya que permanece química e isotópicamente casi invariable durante períodos geológicos muy largos, y conservan la composición de los productos de la fotosíntesis de la planta que lo produjo, lo cual posee una valiosa información para la ciencia.
Un aire mucho menos oxigenado de lo que se creía
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En este estudio, que se ha publicado en la revista Geochimica et Cosmochimica Acta, los científicos analizaron los valores del isótopo 13 del carbono de las resinas y los compararon con otras 126 muestras de resinas actuales. El resultado fue sorprendente, pues a diferencia de lo que se ha planteado, los niveles de oxígeno de la mayor parte de los pasados 200 millones de años fueron menores que los actuales, en particular en los períodos Triásico y Cretácico, cuando los dinosaurios dominaban por completo la Tierra.
Para tener una idea desde el punto de vista comparativo, el nivel actual de oxígeno en la atmósfera es del orden del 21%, y según los cálculos de estos científicos, en aquellos años estaría solo entre un 10 y un 15%.
El oxígeno no explica el gigantismo
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Tras estos resultados queda en entredicho la teoría ampliamente extendida de que el gigantismo de los dinosaurios, reptiles, los insectos y otros organismos del pasado se debía a una hiperoxigenación de la atmósfera de hasta un 25%. La baja oxigenación, según plantean, se pudo deber entre otras causas, a la intensa actividad volcánica de aquellos períodos, la cual consumía inmensas cantidades de oxígeno y liberaba toneladas de CO2 a la atmósfera, alterando los porcentajes de los gases del aire.
Luego de esta investigación quizás otras teorías que explican el gigantismo se apliquen mejor al caso dinosaurios que la cuestión del oxígeno atmosférico, que al parecer, podría ser finalmente descartada.
¿Conocías la teoría que intentaba explicar el gigantismo en algunas especies por la existencia de altas concentraciones de oxígeno en la atmósfera? ¿Quieres saber cuál es actualmente el reptil más grande del mundo?