Los brillantes genios de la Edad Moderna: Gerardus Mercator

El hombre que revolucionó la cartografía, facilitando la vida a marinos y navegantes. Te invitamos a conocer algunas claves sobre  Gerardus Mercator, genio de la Edad Moderna.

¡Si la Tierra fuera plana, qué fácil sería navegar!

Hasta el siglo XVI los navegantes tuvieron un problema: no había una representación plana del globo terráqueo lo suficientemente buena como para trazar el rumbo más corto entre un punto y otro mediante una línea recta.

La importante carencia fue resuelta en 1569, cuando un geógrafo, cartógrafo y matemático flamenco de nombre Gerard Kremer (1512 – 1594), latinizado como Gerardus Mercator, desarrolló la célebre proyección que ahora lleva su nombre. La proyección de Mercator fue tan ingeniosa, que casi 450 años después, una de sus variantes es utilizada por las empresas que proveen mapas por Internet, como Google Maps.

¡Si la Tierra fuera cilíndrica, qué fácil sería mapearla!

Si la Tierra fuera cilíndrica qué fácil hubiera sido hacerle un mapa plano desde mucho antes de Mercator. Simplemente, se corta longitudinalmente el cilindro y se despliega como un plano rectangular. Quizá pensando en ello fue como llegó el golpe de genialidad de Mercator para hallar la solución.

Mercator introdujo un globo terráqueo en un cilindro de igual diámetro al de la esfera terrestre. Luego proyectó diferentes líneas desde el centro de la esfera hasta su superficie y fue marcando esos puntos sobre la esfera. Luego proyectó esos puntos sobre la superficie del cilindro para hallar sus «equivalentes». Finalmente, desplegó el cilindro en un plano.

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Otra víctima de la intolerancia religiosa

Casi 70 años antes de Galileo, Mercator estuvo a punto de correr con la misma suerte del célebre astrónomo italiano. El flamenco fue acusado de herejía por la iglesia católica, al mostrar su tolerancia hacia el movimiento protestante.

Para su fortuna, el Santo Oficio de la Inquisición no era tan radical en Flandes como en España o Italia y Mercator estuvo solo 7 meses en prisión. Algunos años después de salir de la cárcel, se trasladó a Alemania, donde desarrolló la mayor parte de su trabajo de cartografía, bajo la protección del duque Guillermo de Cléveris.

Uno de los discípulos de Mercator, el también flamenco Abraham Ortelius, presentaría en 1570 el primer atlas mundial, una colección de 70 mapas. Pero fue Mercator quien introdujo la palabra «atlas» en el lenguaje cartográfico.

Errores perdonables

En el plano terráqueo de Mercator, los meridianos y paralelos, que sabemos que son líneas curvas, se representan como rectas. No es la única violación de la proyección Mercator a la geometría esférica. En la Tierra aplanada según el método Mercator, los lugares más cercanos a los polos se ven más grandes que los próximos al ecuador.

Estas distorsiones llevaron a que muchos mapas construidos con la proyección Mercator colocaran, por ejemplo, a Alaska de tamaño similar al de Brasil, cuando el gigante amazónico es 5 veces mayor. Incluso, no faltó algún tonto que acusara de discriminación racial a los usuarios de la proyección Mercator, ya que África aparecía mucho más pequeña que Groenlandia. Estas distorsiones han venido siendo corregidas con el progreso de la cartografía.

Cuándo busques un lugar por Google Maps u otro servicio online, recuerda que detrás del mismo está el aporte de un hombre que vivió hace más de 500 años.

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