En un zoológico de Rafah, en Franja de Gaza, Palestina se llevó un cruel acto de maltrato animal: las autoridades del establecimiento decidieron amputarle las garras a una leona para que los visitantes puedan jugar con ella sin peligro.
Le cortaron las uñas a una leona para que no dañe a los niños: nos terminaron lastimando a todos

A la leona de 14 meses llamada Falestine, le realizaron la mutilación en el propio zoológico y el video se viralizó por Internet. Four Paws, una organización que defiende el tratamiento ético de los animales, denunció la situación, alegando que el procedimiento fue sumamente agonizante.
One of Many: A face of Sorrow. This 14-month-old lioness suffered unimaginable cruelty after she was declawed with garden shears in an amateur & dangerous medical procedure. With our help she’ll be rehabilitated by a team of specialized veterinarians https://t.co/9BZkjiNg4d pic.twitter.com/OTw5yTnCIv
— FOUR PAWS USA (@FOURPAWSUSA) March 24, 2019
Mohammed Jumaa, propietario del zoológico palestino, dijo al medio Daily Mail: «Lo que hicimos fue reducir la agresión de la leona para que pueda ser amigable con los visitantes». Mientras que Fayez al-Haddad, el veterinario que operó a Falestine, agregó: «Las garras se cortaron para que no crecieran rápido y los visitantes y los niños pudieran jugar con ella».
A su vez, Four Paws explicó en su página web que a la leona le mutilaron las garras con una tijera de jardín, lo que equivale a cortarle el dedo a los humanos hasta el nudillo. Además, comentaron que el comportamiento natural del animal, como agarrar comida o escalar, ahora es casi imposible porque para hacerlo, necesita las garras.
Por otro lado, dado que la amputación no se realizó en una clínica veterinaria adecuada, la probabilidad de infección es alta.

Este horrible acto de crueldad animal, nos llama a reflexionar: ¿Hasta cuando seguirán existiendo los zoológicos? ¿Hasta cuando los animales seguirán sufriendo a costa del «disfrute» o «entretenimiento» de los humanos?