Estas son algunas historias que se cuentan de la antigua Rusia y que ya forman parte de la cultura urbana del país.
Las interesantes (aunque aterradoras) historias del folclore ruso y sus mitos urbanos

Serpiente de fuego
Conocida como la « serpiente ardiente», es un ofidio de fuego gigante presente en los mitos culturales rusos. Desciende de los cielos como un cuerpo en llamas para mutar a forma humana al tocar tierra. Es bastante desalmada y adquiere la forma del ser amado perdido por la persona ante la cual se materializa, haciéndole creer que nunca se fue. Tras percatarse de que es una ilusión, la víctima termina suicidándose.
Monstruos del metro

Una leyenda rusa dice que Stalin hizo construir por debajo de Moscú el Metro-2, un sistema de transporte secreto conectado con el Kremlin. Se habla de criaturas híbridas creadas en laboratorios de experimentación soviéticos, que estaban alojadas en las profundidades. Rusos veteranos afirman que los monstruos son leyendas, pero el Metro-2 fue una realidad.
Barranco de Golosov
Esta historia narra que un grupo de soldados mongoles ingresó en un lugar del sureste de Moscú llamado Barranco Golosov con el fin de explorarlo. Salieron al poco tiempo, pero cuando lo hicieron no reconocieron nada, como si hubieran transcurrido 100 años. Desde entonces, el barranco es considerado como un portal del tiempo al reportarse desapariciones de personas.
Privación de sueño

Se afirma que uno de los crueles experimentos de la ciencia soviética consistió en no dejar dormir a los prisioneros para tomar nota de su comportamiento luego de largos períodos de tiempo. Estos conejillos de Indias comenzaron a parecer cada vez menos humanos y se dice que terminaron asesinando a los científicos.
Pozo al infierno
En otro intento por imponer un récord mundial, existe la leyenda popular de que la URSS perforó un hueco en la tierra a tal profundidad que terminaron llegando al mismo infierno. Como consecuencia, miles de espíritus resentidos escaparon del llamado « pozo del infierno» y regresaron a la Tierra para consumar sus venganzas.
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Volga Negro

Una de las leyendas soviéticas más famosas es la de un automóvil negro que recorría de noche las calles moscovitas. Al parecer, el llamado Volga Negro era conducido por el mismísimo diablo y su objetivo era secuestrar niños y llevarlos al infierno. La leyenda probablemente no estaba muy alejada de la realidad, ya que las fuerzas de seguridad de la URSS secuestraban gente de noche y el Volga era el vehículo oficial del régimen.
¿Te ha inquietado alguna de estas leyendas o tú no crees en las brujas?
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