Las 6 tendencias de pérdida de peso más ridículas de la historia

La desesperación por ser delgados puede llegar a límites absurdos. Gracias a la publicidad y los medios, muchas personas miran sus kilos demás con tanto desprecio que serían capaz de hacer cualquier cosa con tal de sacárselos de arriba. Hacer cosas ridículas, como las dietas de comida de bebé que adoptan las modelos, no son cosa exclusiva de la modernidad.

De hecho, a lo largo de la historia muchos inventores y estafadores han sacado provecho de nuestra obsesión con la delgadez para sacarnos dinero con algunos inventos que son tan ridículos que cuesta creer que sean reales. Aquí te mostramos algunas de las tendencias para perder peso más locas de la historia. 

1. Cigarrillos para adelgazar

La nicotina de los cigarrillos puede reducir el apetito, pero a un gran costo. Asimismo, esta marca de cigarrillos podía disminuir el apetito «secando» y «reduciendo los tejidos» de la boca, según su fabricante, que también afirmaba que fumar esta marca podía hacerte perder hasta 9 kg en cuestión de 8 semanas. No podían ser muy saludables y, por suerte, la FDA (Administración de alimentos y drogas de Estados Unidos) los prohibió en 1958.

2. Lombrices solitarias

No hace falta poner una foto para que se entienda la idea. En el siglo XX salió en el mercado un nuevo producto para la pérdida de peso: paquetes de parásitos listos para tragar. Lo bueno de comerse una lombriz es que puedes comer lo que quieras y perder kilos sin mover un dedo, lo malo es que, bueno, tienes un parásito viviendo adentro. 

Entre los problemas que pueden causar las lombrices solitarias están los dolores abdominales, infecciones, nausea, fatiga y muchas cosas más.

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3. Lentes para perder peso

Estos lentes salieron al mercado en los años 70 y, por obvias razones, no duraron mucho. Primero: ese modelo nunca podría estar a la moda en ningún momento de la historia. Y segundo, los fabricantes sostenían que si los usabas podías perder peso de dos formas: si ibas al mercado a comprar comida serías menos propenso a comprar productos con paquetes coloridos porque no podrías distinguirlos y los vidrios de tonos distintos tenían «una tecnología de colores secreta de Europa» que podía disminuir el apetito. Lo único que podrían haber dado esos lentes es migraña.

4. Saunas portátiles 

Si sudar realmente nos hiciera perder peso, entonces cuando llega el verano todos estaríamos delgadísimos. Sin embargo, la lógica no detuvo a esta empresa que, en 1972, lanzó unos pantalones inflables que se calentaban para eliminar las grasas del área abdominal a través del sudor.

5. Algodón

Nos encantaría poder decir que comer algodón era una moda de hace un par de siglos y poder reírnos de las personas del pasado y su ignorancia, pero no. En 2013 varios medios alertaron sobre esta nueva tendencia para perder peso, que consiste en mojar bolas de algodón en jugo de naranja o agua y tragarlas.

Las personas que tragaban algodón se sentían satisfechas y comían menos, o nada en lo absoluto. Los efectos de seguir esta «dieta» pueden ser muy serios, además de que no aporta nada al organismo, puede causar problemas en el tracto digestivo. 

6. Pastillas para adelgazar

Esta es otra de las tendencias que, lamentablemente, continuamos siguiendo. Las pastillas para perder peso están por todas partes, en las farmacias, en las tiendas de productos deportivos y hasta en los supermercados, pero hay que tener mucho cuidado con ellas. 

Con esto no queremos decirte que no compres suplementos para hacer dieta, solo que investigues bien para tomar las decisiones más saludables posibles. Algunas están hechas con productos naturales, pero otras, como los productos de la empresa HCG (que fueron prohibidos en Estados Unidos en 2011) contenían ingredientes que podían causar problemas hormonales y de tiroides.

¿El secreto para perder peso? No existe

Lamentamos comunicarte que no hay una fórmula sencilla para perder peso, ninguna píldora mágica ni parásito benevolente, si alguna vez encuentras un producto que te promete resultados rápidos y duraderos duda, puedes estar cayendo en una trampa.

El único secreto es alimentarse de forma saludable (no pasar hambre con dietas prohibitivas) y hacer ejercicio regularmente. Es aburrido, pero sigue siendo mejor que comer algodón o usar lentes pasados de moda.

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