Parece que esta tinta china llamada Hu-Kaiwen puede serle útil al ser humano mucho más allá de permitirle contar historias o plasmar en papel aquellas ideas que tiene en la mente. La composición de la tinta china puede brindarnos un nuevo material para desarrollar más eficientemente la terapia fototérmica.
La ciencia encuentra en antigua tinta china avances para una terapia contra el cáncer
Por:Univision
Para ser más exactos, investigadores de la Universidad de Fudan, en Shanghai, encontraron que algunas de las moléculas que componen a la tinta Hu-Kaiwen pueden cumplir una función importarte en la novedosa terapia que intenta matar células cancerosas.
Antigua tinta china brinda avances para el desarrollo de la terapia fototermal
Imagen Shutterstock
Los investigadores se encontraban haciendo pruebas con esta tinta —también conocida como Hu-ink— después de notar que contaba con ciertas similitudes respecto a los nanomateriales artificiales utilizados en un novedoso tratamiento contra el cáncer: la terapia fototermal.
Las terapias fototermales consisten en infestar a las células del cáncer con esos nanomateriales para después calentarlas con un láser, haciendo que las células cancerosas mueran. La terapia es bastante efectiva pero los materiales usados son demasiado caros, además de que no puede usarse cualquier tipo de material pues pueden llegar a ser realmente peligrosos.
La tinta china aparece entonces como una excelente alternativa, partiendo de la base de que su precio es mucho más accesible que el precio del material más usado hasta ahora: el oro. Frente a este dilema los investigadores estuvieron investigando nuevas variables, entre las que aparece esta tinta china que cuenta con el color oscuro necesario para absorber la luz y el calor, que es estable en el agua y no es tóxica para el cuerpo.
Para poder comprobar las bondades de la tinta china, los investigadores la pusieron a prueba, descubriendo que las nanopartículas de carbono que la componen calientan más rápida y efectivamente a las células cancerosas que los materiales artificiales que usaban hasta ahora. Después de 90 días, no se observaron cambios en la tinta, lo que según los especialistas revela que tienen un efecto fototérmino que es estable.
Posteriormente la tinta fue probada en ratones, como suele hacerse a la hora de poner a prueba a este tipo de tratamientos. La tinta fue más efectiva que los materiales tradicionales de esta terapia matando a más células cancerosas de lo esperado y sin mostrar ningún tipo de toxicidad o efecto secundario.
Durante el curso del tratamiento ni siquiera varió el peso de los ratones, siendo esta una buena señal acerca de la ausencia de efectos secundarios de notoriedad. La tinta demostró que tiene buena compatibilidad con el cuerpo. Por otra parte, no se detectó ningún tipo de daño en los órganos de los ratones, como el cerebro, el corazón, el pulmón, el bazo o el riñón.
Más allá de todo, hace falta aún hacer pruebas en seres humanos antes de afirmar que la tinta genera avances prometedores en la terapia, aunque todo parece indicar que de una forma u otra este avance hará que la terapia fototérmica comience a adquirir mucha más importancia.
Por el momento las dudas siguen en pie, pero quizás en el futuro recordemos al 2017 como el año en el que una antigua tinta china nos dio la clave para desarrollar más efectivamente a este novedoso tratamiento contra el cáncer.
¿Qué opinas sobre los avances que nos puede brindar esta antigua tinta china? ¿No es asombroso como puede estar compuesta por materiales útiles para el desarrollo de las terapias fototermales?
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