En la ciudad de Jodhpur, ubicada en el estado de Rajastan de la India, no hay espacio para otro color que no sea el azul. Desde sus orígenes, cada construcción de La Ciudad Azul, tal como se la conoce en el mundo, fueron pintadas del color del cielo por iniciativa de los brahmanes, que eran miembros de una casta alta respetable en la India.
Jodhpur, la Ciudad Azul


Con el tiempo, esta costumbre de la clase alta se trasladó al resto del pueblo y todos volvieron a elegir al azul como color favorito para colorear sus hogares. Además de la presencia de este color, Jodhpur se caracteriza por sus calles estrechas que reducen el resplandor del sol, pues se encuentran en una zona demasiado calurosa cerca del desierto de Thar. Y así la sombra es maximizada entre las construcciones azules.
La Ciudad Azul es vigilada por la inmensa fortaleza medieval de Mehrangarh, ubicada sobre la cima del Monte de las Aves. Cuenta la leyenda que un hombre alguna vez vivió allí en el monte y fue obligado a retirarse en el momento en que comenzó a construirse la fortaleza. Como venganza, el hombre lanzó una maldición sobre la estructura: prometió que esta árida zona del planeta no tendría agua. Casualmente, Jodhpur sufre alrededor de 2 o 3 sequías importantes por año.
Si el azul es uno de tus colores favoritos, como me sucede a mí, no puedes perderte las imágenes de la ciudad que le hace homenaje.











