Jerusalén, la Ciudad Santa

Por:
Univision
Publicado el 8 jun 12 - 09:12 AM CDT. Actualizado el 5 abr 18 - 12:47 PM CDT.

Jerusalén ejerce una fascinación mágica en quien la visita. Las tres religiones monoteístas más importantes del mundo convergen aquí y para cada una de ellas Jerusalén es como un faro que los guía en su camino y por uno u otro motivo les sirve de inspiración. La aman y la respetan y ella se deja amar y respetar al igual que las soberanas lo hacen con sus súbditos. La ciudad más importante de Israel abre sus puertas a todos los creyentes.

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Es muy raro ver en la ciudad una cabeza descubierta, hay cientos de puestos callejeros y tiendas que venden sombreros, gorras y tocados de todo tipo, pero no se los debe comprar y usar al azar, cada tipo o modelo representa algo y tiene un ritual de uso, se relacionan no sólo con la religión sino con la clase social y la jerarquía que se posea.

Las tres caras de Jerusalén

Esta bella capital se divide en tres partes: la Ciudad Antigua, Jerusalén Este y la Ciudad Nueva. Desde esta última estamos a diez minutos a pie de la primera, siempre en subida, trepando la colina, las calles nos llevan hasta las grandes murallas del pasado.

Imagen thinkstock

Allí se puede visitar la gran Cúpula de la Roca, también conocida como la Mezquita de Omar, según la tradición popular es desde aquí que el profeta Mahoma ascendió a los cielos; y podemos ver el llamado Muro de los Lamentos, parte que queda aún en pie del muro de contención que levantara, en el año 20 de nuestra era, Herodes el Grande para sostener la gran estructura del templo hebreo que estaba en lo alto de la explanada, a él acuden los fieles a llorar por la destrucción del mismo; para los cristianos la visita obligada es el Santo Sepulcro.

Atravesamos numerosos mercados y puestos callejeros de artesanías. En algún café con terraza sería agradable sentarnos para degustar el felafel, un plato tradicional preparado con garbanzos, algo de carne, hierbas y especias entre dos grandes rodajas de pan.

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La primavera es fresca en estos lados aunque a escasos sesenta kilómetros, cruzando el desierto de Judea, tenemos el Mar Muerto, una depresión que se halla a trescientos metros por debajo del nivel del mar donde la temperatura asciende notablemente.

Desde sus orillas contemplamos a varias personas flotando sobre su densa superficie, con la piel cubierta por el barro arenoso de la playa puesto que aseguran tiene propiedades curativas y rejuvenecedoras.

Atracciones de la Ciudad Santa

A poco más de un kilómetro hacia el Norte, en la desembocadura del Río Jordán, encontramos las cuevas de Qumran, en las que un simple pastor de la zona descubrió los célebres manuscritos enrollados que completan, de algún modo, los textos bíblicos.

Imagen thinkstock

Otro sitio que debemos ver es Jericó, hoy en día sólo un pueblo más, pero donde nos maravillan la amabilidad de sus habitantes y la buena acogida que nos brindan. Para regresar desandamos el camino, ya es el atardecer cuando estamos acercándonos a la Ciudad Santa y en un recodo del camino lo primero que nos hace reconocerla es la bellísima y gigantesca cúpula dorada de la Mezquita, donde los rayos del sol poniente se reflejan.

¿Te gustaría conocer una ciudad tan importante para la vida religiosa? ¿Qué atracciones te gustaría más conocer?