La hazaña de programar un monstruo de 27 toneladas, con 6000 interruptores de accionamiento manual.
Estas mujeres cambiaron por completo la historia de la Informática hace más de 50 años... y recién ahora son reconocidas


Proyecto secreto

En 1942, el Laboratorio de Balística del Ejército estadounidense reclutó a 6 jóvenes mujeres matemáticas para que trabajaran en un proyecto clasificado: la programación de ENIAC (Electronic Numerical Integrator And Computer), el primer ordenador de uso general, originalmente concebido para calcular la trayectoria de proyectiles.
Ellas fueron Betty Jean Jennings Bartik, Kathleen McNulty Mauchly Antonelli, Ruth Lichterman Teitelbaum, Frances Bilas Spence, Marlyn Wescoff Meltzer y Betty Snyder Holberton.
Entre cientos de metros de cables

Programar la monstruosa computadora no era poca cosa. Tenía 18 000 tubos de vacío, 70 000 reóstatos, 10 000 condensadores; también 5 millones de puntos de soldadura a mano, que no había que incluir en la programación, pero que podían ocasionar contratiempos si alguno fallaba.
Todo lo que recibieron las programadoras fue una montaña de documentos con los diagramas y planos de la máquina.
La única ventaja era el amplio espacio para trabajar, ya que el mastodonte de 30 metros de largo estaba en una enorme sala. Tenían aire acondicionado, pero cuando el equipo estaba a tope la temperatura del local era de 50° C.
Las mujeres eran llamadas las « Computadoras», trabajaban en dobles y hasta triples turnos 6 días a la semana y tenían que arrastrase entre las bandejas de cables para arreglar alguna conexión defectuosa. Su eslogan era «Observa como una muchacha, actúa como una dama y trabaja como un perro»
Cuando lograron la proeza de programar al enorme trasto, este podía calcular cualquier ecuación compleja a una velocidad 10 000 veces mayor que la máquina de calcular más rápida.
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Mujeres sin el reconocimiento merecido
Como era usual en la época con las mujeres, no recibieron el crédito que merecían, hasta el punto de que ni siquiera fueron invitadas a la cena celebrada después de la ceremonia de presentación.
El reconocimiento no llegó demasiado rápido. Hubo que esperar hasta 1997, cuando fueron incluidas en el Salón de la Fama Internacional de las Mujeres en la Tecnología, institución fundada en 1996. Para entonces, Ruth Lichterman Teitelbaum ya llevaba 11 años de muerta. En 2014 fue emitido el documental Las Computadoras ya con todas fallecidas.
Las empresas de alta tecnología son de las mayores empleadoras de mujeres, pero siguen en deuda con las damas.
A pesar de que los estudios indican que las chicas son mejores programadoras que los chicos, solo dos grandes empresas superan el 40 % de mujeres en su nómina: Ebay con 43 % y Linkedin con 42 %. Samsung tiene 37 %, Facebook 32 %, Apple 31 %, Google 30 % y Microsoft 27 %. Muy poco todavía.
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