Hace aproximadamente 30 años la rana de la especie Jambato —que es prácticamente toda negra excepto por su panza naranja— fue declarada extinta en Ecuador, en un anuncio que sugirió que no la iban a volver a ver.
Esta rana encontrada por un niño en Ecuador podría revivir a una especie completa

Sin embargo, cuando hace un tiempo el Centro Jambatu de Investigación y Conservación de Anfibios abrió un concurso con un premio monetario para quien encontrara un ejemplar —aunque no esperaban que eso sucediera— la aparición de un niño los dejó en un completo estado de sorpresa.
La rana encontrada por el niño puede salvar a la especie

La rana, hace muchos años, era de lo más normal en Ecuador cuando muchas personas la usaban como ingrediente para muchas medicinas o los niños para divertirse jugando con ellas.
Sin embargo, por los efectos de una enfermedad, sumado a los cambios en el entorno, la rana desapareció para la sorpresa de prácticamente todas las personas.
Frente a la búsqueda con recompensa monetaria impulsada por el Centro Jambatu de Investigación y Conservación de Anfibios, un niño encontró no solo a una de estas ranas sino a una colonia completa.
La rana finalmente comienza a reproducirse

Los especialistas involucrados en la preservación de la especie de esta rana tomaron entonces el desafío de ayudarlas a revivir y nuevamente poblar la zona de este bello ejemplar. Para esto, las ranas fueron llevadas a un laboratorio en donde iban a tener que reproducirse.
El laboratorio obtuvo para el proceso varias decenas de ranas y cerca de un año después del comienzo de los experimentos, han celebrado el nacimiento de 500 ranas de esta especie.
Si bien la crianza de las ranas en el laboratorio fue como una medida desesperada —que además resulta muy costosa—, ha dado realmente buenos resultados para lo que era el objetivo: repoblar a una especie en extinción.
El equipo ha declarado que no fue un proceso simple, ya que durante meses las ranas no quisieron poner huevos en el laboratorio. Los especialistas tuvieron entonces que replantearse la forma de hacerlo y la clave estuvo en finalmente llevar a las ranas a un espacio exterior en lo que fue un hábitat artificial creado para ellas.
La población de las ranas claramente sigue siendo bastante pequeña y la especie sigue estando en peligro, pero la capacidad del laboratorio para promover la reproducción ha llegado como una luz de esperanza y expectativa para quienes se preocupan por la especie.

¿Crees que estas ranas podrán volver a poblar Ecuador? ¿Podremos, en el futuro, revivir más especies en extinción?
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