Esta pareja de mujeres pudo cargar a su hijo en ambos vientres gracias a una nueva técnica

Cuando una pareja del mismo sexo desea tener un bebé, por lo general se recurre a la fertilización in vitro (FIV), la adopción o a una madre subrogada. Pero con los avances tecnológicos, una pareja de mujeres estadounidenses logró cargar a su bebé en el vientre de ambas. (También existe otra técnica que podría ayudar a las parejas lésbicas u homosexuales a tener un hijo biológico en el futuro).

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Una historia nunca antes vista

Ashleigh y Bliss Coutler están juntas desde hace seis años y ambas deseaban compartir la experiencia del embarazo y la gestación. En esta instancia, lo que suele hacerse es que una de ellas done uno de sus óvulos, mientras que la otra reciba al embrión en su útero. Pero en el caso de este matrimonio de Texas, las dos tuvieron un papel importante en la formación de su bebé.

Imagen thinkstock

Una FIV tradicional ocurre de la siguiente manera, como explica el centro de fertilidad CARE: una mujer recibe un tratamiento hormonal para que produzca óvulos maduros, los cuales son recolectados para fertilizarlos con el esperma de su pareja o de un donador.

Los embriones se desarrollan en un laboratorio especializado y, de tres a cinco días después, se transfiere uno de ellos al útero de su madre.

La técnica a la que recurrieron Bliss y Ashleigh se llama 'FIV recíproca sin esfuerzo'. La única diferencia con una fertilización in vitro es que, en lugar de que los embriones crezcan en un laboratorio, lo hacen dentro de un dispositivo de plástico que se implanta en la vagina de la mujer.

¿Cómo funciona la FIV recíproca sin esfuerzo?

La Doctora Kathy Doody y su esposo el Dr. Kevin Doody fueron los encargados de este caso considerado el primero de su especie en el mundo. La Dra. Kathy explicó en USA Today que los óvulos utilizados fueron de Bliss, los cuales se fertilizaron con el esperma de un donador.

Los gametos se colocaron dentro de un dispositivo llamado INVOcell y Bliss lo tuvo dentro de su cuerpo durante cinco días, los suficientes para que los embriones se formaran.

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Cuando retiraron el INVOcell, los embriones se congelaron hasta que Ashleigh terminó el tratamiento hormonal pertinente y estuviera lista para recibir uno de ellos. Ella logró embarazarse al primer intento y, meses después, la pareja recibió al pequeño Stetson en su hogar.

Imagen Shutterstock

Ambas están felices de haber participado juntas en este impresionante hecho. Ashleigh comentó en USA Today:

«Eso lo hizo muy especial para las dos, que ambas estuviéramos involucradas. Ella pudo ser parte de ello, y yo pude ser parte de ello».

El centro de fertilidad CARE fue en donde Bliss y Ashleigh lograron cumplir su sueño de maternidad. Pero no sólo la FIV recíproca sin esfuerzo fue posible, sino que su costo fue mucho menor al de una fertilización in vitro común.

Como no se necesitó de un laboratorio para incubar a los embriones, los gastos se redujeron y el precio final del procedimiento fue de 8,000 dólares. Una FIV suele costar entre 15,000 y 20,000 dólares.

Por si te interesa, aquí te compartimos un video de cómo se ve la formación de un embrión desde el día uno al cinco de su incubación:

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